Tristeza y rabia en Níjar tras el fatal desenlace

Tristeza y rabia son los sentimientos que se repiten entre los voluntarios que han participado durante estos doce días en las labores de búsqueda del pequeño Gabriel Cruz. El niño ha aparecido muerto en el maletero del coche de la pareja del padre. Una joven que regresaba este domingo de una de las batidas asegura que están en shock y que ahora sienten mucha rabia y tienen muchas preguntas. Otro de los vecinos que ha participado en el operativo confiesa que antes de conocer la noticia de la muerte de Gabriel todo era ilusión y energía, pero que cuando les contaron todo se acabó. Además, la alcaldesa de Níjar, Esperanza Pérez, ha decretado tres días de luto oficial y ha lamentado el fatal desenlace del caso.