Detenida una mujer por abofetear a su hija

Se activa el protocolo de violencia doméstica. La policía municipal de Santander llega a la casa y la madre reconoce que ha pegado a la niña. Se la llevan detenida hasta que se comprueba en el hospital que la niña no tiene lesiones. Para tres horas en comisaría. Parece desmesurado, pero la policía debe velar por la integridad del menor. El juez archivó la causa al día siguiente. Pero el debate, una vez más, está abierto. Algunos expertos apuntan que casos como éste no se deberían abordar desde la justicia. Proponen recurrir por ejemplo a la mediación familiar.