Aitana ha renunciado a las discotecas: "Yo también sé que la mascarilla me corta bastante el rollo estando de fiesta"
Aitana Fernández, de 32 años, era una asidua a locales de ocio nocturno. Durante el confinamiento, ella y sus amigos trataban de replicar la experiencia -con un éxito limitado- introduciendo en las videollamadas grupales "copazos", música e incluso baile. Sin embargo, desde aquel lejano marzo de 2020, no ha vuelto a pisar una discoteca. Lee completo su testimonio y el de otros jóvenes en pandemia: "Ya no salgo, no me merece la pena contagiarme por una noche de fiesta".