Una perra adopta a unos cerditos huérfanos y los amamanta

A Linda, una perra de Playa Larga, en Cuba, la maternidad le ha llegado por partida doble. Porque dio a luz a seis cachorros. Pero a su dueño, Ignacio Estévez, se le murió la cerda, que también acababa de parir. Por eso tuvo una idea: poner a los cochinillos huérfanos a mamar de la teta de Linda, quien de buen agrado, también aceptó a estos nuevos "hijos adoptivos". Los cerditos, hambrientos, buscan sin parar los pezones de Linda, que tranquila se postra para que puedan comer. Ignacio asegura que se sorprendió. Su casa se ha convertido en un lugar de peregrinaje para los vecinos, quienes si no lo ven, no lo creen.