El nivel de alerta antiterrorista de algunos países se ha convertido en factor decisivo a la hora de elegir destino de vacaciones. Muchos extranjeros están escogiendo España y muchos españoles, que viajan fuera del país, han decidido también improvisar tras los atentados. El temor a sufrir un ataque se ha colado en las maletas de muchos y se ha convertido en un factor decisivo a la hora de planear las vacaciones. Lo notaron París y Bélgica tras los últimos ataques de Estado Islámico. Pero donde la sensación de inseguridad está haciendo estragos es en países como Túnez, Marruecos, Egipto o Turquía. Así, el terrorismo está colaborando en dibujar un nuevo mapa turístico.