Soldados rusos confiesan haber sido engañados para ir a Ucrania: "Esta no es nuestra guerra"

Este soldado ruso, ahora prisionero de guerra, habla con algún familiar en algún lugar de Rusia. Al otro lado, alguien llora. Él, esposado, no puede contener el llanto. Es su hermana quien responde al teléfono. Le cuenta que está preso en Ucrania. Me están tratando bien, asegura. 

Algunos soldados son muy jóvenes. Entre 18 y 25 años con heridas en el rostro. Van diciendo a qué unidad pertenecían. Línea directa habilitada por el Ministerio de Defensa ucraniano. Un móvil para llamar a casa y decir: me han cogido. Llora. Entre pregunta y pregunta, a este capitán le ofrecen un cigarrillo. Ahora están en manos de las tropas ucranianas y son varios centenares. 

Interrogatorio para sacar información. Muchos capturados no sabían que iban a la guerra. Objetivo: maniobras. Eso pensaron. Ahora se describen como carne de cañón. Se sienten engañados. Algunos instan a Putin a parar. Esta no es nuestra guerra, afirma. Otros sí aseguran haber entrado en Ucrania para matar gente.