El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha asegurado que en el proceso de reestructuración de la entidad bancaria tras la fusión con Bankia, para el que ha planteado un ERE de 8.291 empleados inicialmente, "no contemplan más escenarios que un acuerdo razonable" aunque ha señalado que ve "margen para cambiar cosas". Gortázar ha destacado el compromiso de la entidad de "hacer las cosas de la mejor manera posible" y ha defendido que no pueden ir a la "inacción" porque considera que se podrían "en peligro" los 43.000 empleos que quedan en CaixaBank.