Un estudio, muy curioso, de la Universidad de Bristol (Reino Unido) ha descubierto que las gaviotas urbanas están cambiando sus horarios de comida. Estas aves -que son muy inteligentes- se alimentan ahora en los colegios, justo a media mañana, a la hora del recreo. Estos hallazgos sugieren que las gaviotas pueden tener la flexibilidad de comportamiento necesaria para adaptar su conducta de forrajeo (búsqueda de comida) a los horarios humanos cuando a ellas les resulte beneficioso, y que este rasgo de conducta las ayuda a prosperar en las ciudades.