Un juego más complicado de lo que parece. La habilidad y el ingenio son vitales para conseguir salvar a todos los vikingos atrapados en el hielo o aislados por otros obstáculos y llevarlos sanos y salvos hasta el barco en cada una de las fases.

Nuestra herramienta principal es el puntero, que sirve para cortar casi cualquier cosa que aparezca en pantalla: desde el hielo, hasta cuerdas u obesas vikingas.

Hay que tener cuidado con los lobos, evitar que los vikingos caigan al agua, provocar efectos dominó, utilizar agarres mágicos desde un tipo de rocas especiales... y no desechar ninguna posibilidad.

No todas las soluciones son evidentes, así que paciencia y ¡a superar los 40 niveles!