El pasado mes de octubre se conocía la noticia de que Siurana, un pueblo ubicado en Tarragona, rechazaba la propuesta de formar parte de la lista de los Pueblos más Bonitos de España. A este municipio se le ha sumado ahora la localidad barcelonesa de Rupit i Pruït.
La localidad, de apenas 300 habitantes, se sitúa en una de las zonas más bellas de la provincia de Barcelona, en la región de la Collsacabra (Osona). Así, ofrece al viajero unas espectaculares vistas de Les Guilleries, el Montseny y los riscos vecinos de Tavertet, Avenc y el Far. Esta instantánea, junto con el encanto del pueblo, atrae cada año a cerca de 150.000 turistas, sobre todo en los días festivos.
"Nos da miedo la repercusión que pueda tener"
El motivo principal de la negativa a entrar en la lista es la gran afluencia de viajeros que reciben. Por ello, y como indica el portal web Vilaweb, el ayuntamiento de Rupit lo ha rechazado para evitar su masificación. El alcalde, Albert Marcé, explica que están trabajando para hacer el turismo más sostenible y que formar parte de la lista echaría el trabajo realizado por tierra.
"Nos da miedo la repercusión que pueda tener. No es que no queramos turistas, de hecho, vivimos del turismo. Pero debemos ser conscientes de nuestras limitaciones" señala Marcé, según recoge Vilaweb.
El premio al mejor pueblo turístico del mundo
Sin embargo, Rupit i Pruït sí participará en el premio de mejor pueblo turístico del mundo de la Organización Mundial del Turismo. Este galardón reconoce el compromiso con la sostenibilidad y el encanto de los municipios rurales. De hecho, su participación fue la causa de que la asociación Pueblos Más Bonitos de España le propusiera entrar en su lista.
Desde el portal web recogen que el premio de mejor pueblo turístico del mundo sí se adapta a los valores de sostenibilidad por los que llevan tiempo trabajando, según señala Marcé. Destaca que han adaptado el pueblo para hacerlo accesible para personas con discapacidades visuales o auditivas, han obtenido la etiqueta de cielo nocturno de calidad y han aprobado una moratoria para regular sus pisos turísticos. Asimismo, han regulado el tráfico en el centro del pueblo con aparcamientos de pago.
"Queremos que quien venga al pueblo se vuelva a casa contento y que disfrute de su estancia. Al mismo tiempo, queremos cuidar a nuestros vecinos. Ya nos gustaría poder aceptar todos los reconocimientos", remarca Marcé.
Qué hacer en Rupit i Pruït
Si se tiene pensado visitar esta increíble villa medieval, es imprescindible pasear por sus calles y descubrir así todos sus encantos. De todos ellos destaca la hermosa iglesia románica de Sant Joan de Fàbregues, la cual se cobija tras los abruptos riscos naturales.
Igualmente, son dignos de admiración el salto de agua de Sallent y su maravillosa ruta, y el monumento natural de Agullola. En la zona norte se ubican un conjunto de masías diseminadas, que evocan los tiempos en que la riqueza iba ligada a la tierra.
Cómo llegar
Desde Barcelona, el trayecto a Rupit tiene una duración estimada de 1 hora y 45 minutos por las carreteras C-17 y C-153. Por su parte, desde Gerona, el viaje dura 1 hora y 30 minutos aproximadamente por las vías C-25 y C-153.
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