El Caribe está mucho más cerca de lo que parece. En las costas gallegas podemos encontrar enclaves tan paradisíacos como los del lejano mar. Y si no que se lo digan al idílico islote de Areoso, un lugar mágico donde nos espera un agua de intenso color azul y una arena blanca como el talco.
En este islote de la provincia de Pontevedra, los visitantes no tendrán más que relajarse, disfrutar del cálido sol y contemplar las vistas de este paraje natural protegido. Además, se trata de un auténtico edén para los amantes del submarinismo.
El paraíso gallego
Las aguas de la ría de Arousa son las que bañan esta pequeña masa de tierra, una lengua de arena rodeada de arrecifes. Forma parte del municipio de Illa de Arousa, compuesto por varias islas e islotes; un lugar cada vez más de moda en las Rías Baixas.
El islote de Areoso se presenta como un lugar desierto, sin habitar, con una extensión de 9 hectáreas en las que prácticamente solo encontraremos playas paradisiacas en las que pasar una jornada agradable bajo el sol. Y es que solo faltaría una palmera para completar el paisaje y hacernos pensar que realmente estamos en el Caribe.
Cinco dólmenes descubiertos
Con el paso del tiempo, la erosión de las mareas y el viento ha ido descubriendo alguna sorpresa en la superficie de la isla. De este modo, en la parte sur, se han hallado restos arqueológicos muy valiosos: cinco dólmenes. Entre estas construcciones fúnebres la que se encuentra en mejores condiciones es la mámoa.
Este descubrimiento ha ayudado a trazar la historia de los primeros humanos en la zona, y se cree que la isla pudo estar habitada hasta la Edad de Bronce. Y es que hace milenios, el islote estaba conectado por tierra con el continente.
Cómo llegar al islote de Areoso
La principal forma de llegar hasta la isla es mediante pequeñas embarcaciones o en kayak desde la Isla de Arosa, a la cual sí podemos acceder en coche al estar conectada por un puente. Pero es importante tener en cuenta unas consideraciones previas antes de ir a la isla, ya que se trata de un ecosistema frágil. Por ejemplo, está prohibido acampar, hacer fuego, capturar o dañar a los animales salvajes y alterar los elementos arqueológicos.
Qué ver en Isla de Arosa
Mientras que el islote de Areoso es solo una pequeña masa de tierra, la Isla de Arosa tiene una superficie de 7 kilómetros cuadrados. Esta se conecta con el continente a través de un puente de casi dos kilómetros de largo, de hecho, es uno de los más extensos de España.
Entre los puntos de interés de la isla, destacan el Faro de Punta Cabalo, el Parque Natural de Carreirón, el Puerto de Xufre y el Mirador O Con do Forno, el punto más alto y desde donde admirar una panorámica única.
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