La tierra se abre abruptamente en el municipio de Jaraba (Zaragoza) formando el barranco de la Hoz Seca. De por sí, este paisaje de altas y escarpadas paredes de color gris y ocre ya resulta fascinante, pero se suma otro elemento para hacerlo más singular: un santuario incrustado en la propia roca. Se trata del Santuario de Nuestra Señora de Jaraba, un complejo de edificios formado por una iglesia y la casa del santero. Uno de esos rincones poco conocidos, pero espectaculares de España.
El origen del Santuario de Nuestra Señora de Jaraba
La devoción a la Virgen de Jaraba inicia en el siglo VI, con ermitaños que vivían en las peñas de la zona y predicaban a los fieles que acudían hasta allí. Según la leyenda, en el siglo XII la Virgen se le apareció a unos pastores en la entrada del barranco de la Hoz Seca, de modo que decidieron construir un templo donde venerarla: una pequeña capilla en una cavidad de la roca.
Con el paso de los años, el lugar fue ganando importancia, de modo que se construyó también una casa para el santero y el capellán, quienes se encargaban del cuidado y el mantenimiento de las instalaciones. De esta estructura original se conserva la fachada, un arco en la entrada y arcos góticos en el interior. Ya en el siglo XVII fue necesaria una ampliación del santuario, ante la gran cantidad de fieles que llegaban hasta allí para adorar a la Virgen. De este modo, entre 1699 y 1726, se llevaron a cabo los trabajos de mejora.
Una valiosa obra de arquitectura
A día de hoy, el santuario presenta un estilo neoclásico. La iglesia cuenta con una nave con bóveda de medio punto, tres capillas a cada lado y un ábside en forma de concha. En su interior, destaca el altar mayor de estilo barroco con una talla de la Virgen, un gran coro y algunos retablos antiguos, incluyendo el de la capilla original.
Los pueblos de Calmarza, Campillo de Aragón, Cimballa, Villel de Mesa, Cubel y Milmarcos conservan una tradición centenaria y acuden en romería al lugar. Además, todos los interesados podrán descubrir el lugar con las visitas que se organizan los sábados por la mañana, con un coste de 3 €. No obstante, en estos momentos y hasta nuevo aviso, las visitas al santuario están suspendidas.
Cómo llegar al Santuario de Nuestra Señora de Jaraba
El trayecto en coche desde la ciudad de Zaragoza hasta el Santuario de Nuestra Señora de Jaraba es de aproximadamente una hora y media por la A-2.
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