La exclusiva isla española que solo permite visitas guiadas y está formada por cráteres de volcanes

Illa Grossa.
Illa Grossa.
Modes Rodríguez / Flickr
Illa Grossa.

A 56 kilómetros de la costa de Castellón, encontramos uno de los archipiélagos de mayor interés ecológico de todo el Mediterráneo. Este curioso enclave natural no es otro que las Islas Columbretes, formadas por cuatro grupos de islotes: l´Illa Grossa o Columbrete Grande, la Ferrera, la Foradada y el Carallot. El primero de ellos lo forma la isla más grande de todas, y en su llamativo territorio en forma de medialuna encontramos varias sorpresas, desde un fondo marino envidiable hasta una especie de lagartija única en el mundo.

La isla de las serpientes

El archipiélago se formó hace millones de años debido a la actividad volcánica de la zona, de modo que la isla Columbrete Grande está formada a partir de los restos de antiguos cráteres, lo que explica su curiosa forma de elipse de aproximadamente un kilómetro de largo. En ambos extremos de ese medio círculo se encuentran los puntos más elevados de la isla, y en uno de ellos se erige un faro de 61 metros de altura.

Faro de l'Illa Grossa.
Faro de l'Illa Grossa.
Manel / Flickr

Fueron los griegos y los romanos quienes le pusieron el nombre al archipiélago, basándose en la gran abundancia de serpientes que encontraron en las islas. Los primeros la bautizaron como Ophiusa, traducido como 'tierra de serpientes', mientras que los romanos optaron por Colubraria, que significa culebra en latín. Ante el inconveniente que les suponía la presencia desmesurada de este animal, decidieron prenderle fuego a las islas para así acabar con ellas, hasta que, desgraciadamente, quedaron extinguidas.

Un lugar privilegiado para el buceo

Actualmente, la fauna del lugar la forman sobre todo aves como la gaviota de Audouin, la pardela cenicienta, el halcón de Eleonor y el cormorán moñudo. Además, de diez especies de insectos endémicos y una especie endémica de lagartija.

Illa Grossa.
Illa Grossa.
Javier Alcaina / iStock

A pesar de su reducido tamaño, l´Illa Grossa supone un atractivo punto turístico, sobre todo por su preciado fondo marino. Bajo sus aguas, nos encontramos con un mundo ricamente habitado con especies difíciles de encontrar en otros lugares. Es por ello que se organizan excursiones con inmersiones para descubrir su biodiversidad marina.

Cómo llegar a l’Illa Grossa

L’Illa Grossa es la única de las Columbretes a la que se puede acceder. Las visitas deben reservarse previamente y solo se puede hacer en grupos reducidos siempre acompañados por los monitores o guardas. Existen varias compañías que ofrecen las excursiones a la isla como CasaMar desde Castellón o Golondrinas Clavel desde Castellón y Oropesa del Mar.

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