Y es que el reglamento, en el punto dos del artículo 266 del Libro XVII, explica que «durante el transcurso de una temporada, queda prohibido alterar las medidas del rectángulo de juego declaradas al principio de la misma».
Esta práctica ilegal, que el Espanyol utilizó en el antiguo Sarrián en los tiempos que Javier Clemente era su preparador, podría costarle al Athletic una multa del Comité de Competición de unos 1.500 euros.
Aduriz, por su parte, reflexionó ayer en voz alta y aseguró que la decisión de Caparrós «debió haberse hecho de otra forma».
El delantero rojiblanco también justificó la decisión de Caparrós: «Supongo que estaba pensado para que nos beneficiase y fuimos nosotros los que no supimos distinguir las líneas porque fueron tres los saques de banda (dos Del Horno y uno Iraola) que malgastamos. Ellos estuvieron más listos», admitió.
Gabilondo y Amorebieta, k.o.
Los jugadores del Athletic Gabilondo y Amorebieta, que tuvieron que ser sustituidos durante en el encuentro copero en San Mamés ante el Espanyol, sufren sendas contracturas musculares en los cuádriceps. La del medio, en la pierna derecha; y la del defensa vizcaíno, en la izquierda. Ninguno de los dos participaron en el entrenamiento de ayer junto al resto de sus compañeros.
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