En 10 años todos los bloques de tres plantas tendrán que tener ascensor en Andalucía

  • La Junta aprueba el nuevo decreto de accesibilidad.
  • Suprimirá las barreras arquitectónicas beneficiará a un 40% de la población.
  • Adaptará edificios, playas, piscinas, hoteles, autobuses...
Una mujer en su silla de ruedas. (ARCHIVO)
Una mujer en su silla de ruedas. (ARCHIVO)
ARCHIVO
Una mujer en su silla de ruedas. (ARCHIVO)

Dentro de diez años, para una persona discapacitada que use silla de ruedas o algún vehículo para desplazarse ya no será un infierno bajarse del autobús, ir a la playa o subir a la última planta en un edificio antiguo.

El Gobierno andaluz quiere luchar contra las barreras arquitectónicas y ha aprobado el nuevo decreto de accesibilidad que regulará las barreras arquitectónicas en los espacios naturales y edificios públicos.

La norma, que sustituye a la vigente desde 1992, beneficiará tanto a las personas con discapacidad y mayores como a las que tengan algún tipo de problema de movilidad (embarazadas, personas accidentadas...) lo que supone alrededor del 40% de la población andaluza.

Para viviendas de tres o más plantas

La novedad que incluye es que en estos espacios debe habilitarse a partir de ahora un itinerario accesible a estas personas. Esto supone que todas las viviendas y edificios de tres o más plantas deberán tener un ascensor antes del año 2019.

El decreto también incluye una alternativa para aquellas viviendas que, por disposición o antigüedad, es prácticamente imposible instalar un ascensor, porque no hay espacio para ello.

Si vive una persona con discapacidad física propietaria en el bloque, en estos casos, se contempla la posibilidad de que se le permute su vivienda por una vivienda en un edificio donde sí cuente con ascensor.

Más taxis y autobuses

El nuevo decreto permitirá además que se amplíe la accesibilidad en los transportes públicos. De esta forma, aumentará del 10% al 15% la proporción de autobuses interurbanos accesibles. Y además, el cupo mínimo de taxis adaptados deberá alcanzar el 5% de las licencias.

Las administraciones tampoco se librarán del cambio: en el plazo de un año, Estado, Junta y Ayuntamientos deberán tener adaptados todos sus edificios para poder atender sin obstáculos a las personas con movilidad reducida.

Accesos en playas y piscinas

Ir a la playa o a la piscina ya no será un problema, porque la norma de la Junta también afecta a los espacios públicos de ocio y recreo.

De esta forma, las playas andaluzas deberán contar con ese tipo de itinerarios en la arena (rampas y algún sendero para bajar), y obliga alas piscinas a disponer de una grúa o rampa de acceso para personas con movilidad reducida.

Alojamientos turísticos como hoteles, hostales, balnearios y apartamentos también están obligados a ofrecer un mínimo de habitaciones accesibles.

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