El fabricante Cameron Coward ha demostrado que las máquinas de escribir eléctricas habrían sido asistentes inteligentes en la década de los 70 gracias al modelo Silent 700 de Texas Instruments.
Este dispositivo se podía usar como una máquina de escribir normal, no obstante, ofrecía la posibilidad de emplearse como un ordenador remoto mediante un módem incorporado y un acoplador acústico.
El producto podía enviar y recibir mensajes mediante la telefonía para convertir al modelo en un asistente inteligente retro gracias un script que se ejecutaba en una Raspberry Pi Zero W, así pues, mandaba preguntas al motor de respuesta Wolfram Alpha.
Por otro lado, Cameron Coward empleó un ESP32 que se comunicaba con Wolfram Alpha a través de WiFi, interactuaba con la máquina de escribir Silent 700 mediante un puerto serie en vez del acoplador acústico, respondía a preguntas sin utilizar comandos y se iniciaba en segundos.
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