Existen muchos auriculares TWS (True Wireless Stereo) en el mercado, pero pocos conquistan el Olimpo de esta categoría cumpliendo todos los extras de unos audífonos completamente sin cables de gama alta: gran sonido, buena autonomía, resistencia al agua, cancelación activa de ruido y carga inalámbrica.
Con los nuevos Live Pro+, JBL ha dado al fin un golpe sobre la mesa, con unos auriculares que cumplen con nota todos estos apartados.
Los Live Pro+ son muy cómodos de llevar y controlar. Tienen un diseño que se adapta bien y que los mantiene estables incluso al hacer deporte. Ambas superficies son táctiles y programables, para que el usuario les asigne funciones como controlar la reproducción, bajar el volumen o invocar al asistente virtual.
La calidad de sonido es excepcional, gracias a los drivers de 11 mm que le otorgan unos graves potentes, unos medios nítidos y unos agudos agradables. El sonido ambiente y la cancelación activa de ruido funciona muy bien, pero el usuario debe tener claro que un sistema ANC nunca podrá llegar al nivel de reducción de unos auriculares de diadema.
El apartado más flojo es el sonido durante las llamadas. Aunque el sonido tiene la nitidez buena para una conversación en situaciones óptimas, su calidad no llega al nivel de sus competidores.
En cuanto a batería, tienen 7 horas en el auricular más 21 en la funda con carga inalámbrica y en solo 10 minutos de carga dota de 1 hora de autonomía.
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