Hígado graso: estos son los cambios en tu dieta que deberías realizar si te diagnostican esteatosis hepática

Tanto el alcohol como el tabaco tienen consecuencias muy negativas sobre el cuerpo, por lo que es recomendable limitar su consumo en la medida de lo posible.
El alcohol es una de las principales causas del hígado graso.
Pixabay/Free-Photos
Tanto el alcohol como el tabaco tienen consecuencias muy negativas sobre el cuerpo, por lo que es recomendable limitar su consumo en la medida de lo posible.

La enfermedad del hígado graso, más conocida como esteatosis hepática, es un problema muy común, que afecta a prácticamente un cuarto de todos los adultos en el mundo. A menudo cursa sin síntomas y pasa desapercibida, pero en ciertos pacientes puede evolucionar hasta causar problemas como cirrosis, fibrosis o cáncer de hígado.

Hígado graso y alcohol

Por eso, y aunque en el momento de recibir el diagnóstico no se experimente ninguna molestia, es conveniente que las personas que padecen esta patología adopten algunos cambios en su estilo de vida que reducen el riesgo de las complicaciones más graves.

En primer lugar, como explica la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, es importante entender que la esteatosis hepática es una condición en la cual se produce una acumulación de grasa en los tejidos del hígado. Existen dos tipos en función de su principal causa: la alcohólica y la no alcohólica.

Sea como sea, va a resultar conveniente minimizar o evitar cualquier consumo de alcohol, especialmente si normalmente es elevado (en estos casos, es probable que sea la causa de la esteatosis). Esto es porque el proceso de descomposición del alcohol en el hígado genera sustancias dañinas que perjudican los tejidos hepáticos.

Una dieta adecuada

Cuando la causa del hígado graso no es alcohólica, la enfermedad tiende a aparecer ligada a ciertos problemas de salud principalmente metabólicos, tales como el sobrepeso clínico, la obesidad, la diabetes de tipo II, la hipertensión o el uso de ciertos medicamentos.

Por ello, se suele aconsejar a los pacientes que adopten una dieta saludable, que reduzca riesgos como el sobrepeso o los problemas cardiovasculares. Especialmente se recomienda reducir la sal, las grasas saturadas y el consumo de azúcar.

En cambio, las personas con esteatosis hepática deberían tratar de aumentar la presencia de verduras, frutas y cereales integrales en su alimentación, ya que constituyen elementos bajos en azúcares y grasas que resultan beneficiosos. Para maximizar aún más los beneficios de una dieta saludable, se aconseja acostumbrarse a practicar ejercicio físico de manera habitual.

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Referencias

Medline plus. Hígado graso. Consultado online en https://medlineplus.gov/spanish/fattyliverdisease.html el 16/05/2023

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