Cepillo de dientes tradicional o eléctrico ¿cuál es más efectivo?

Dra. Patricia Palma Maldonado

• Odontóloga y fundadora de P&P Clinic. Especializada en Cirugía, Implantes y Estética Dental.

El mercado actual ofrece una amplia variedad de opciones en muchos productos y, los cepillos de dientes, son uno de ellos. Desde cepillos manuales a partir de 10 euros hasta algunos eléctricos que oscilan los 250. Sin embargo, más allá de su precio tenemos que hacer hincapié en otro factor, su efectividad. ¿Cuál de las dos alternativas ofrecen un mejor resultado?

Principales ventajas y desventajas: tradicional y eléctrico  

Cuando hablamos de cepillos de dientes manuales nos referimos a aquellos que disponen de un mango de plástico y un cabezal compuesto por varios filamentos perpendiculares que, en algunos casos, también cuentan con almohadillas de limpieza lingual y con estimuladores de encías.

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Su principal beneficio es su capacidad para permitirnos el control sobre la forma en la que nos cepillamos los dientes. De este modo, dependerá de nosotros la velocidad con la que lo hagamos, la fuerza con la que incidamos en cada pieza y el movimiento que utilicemos.

En relación a ello se encuentra también su principal desventaja, ya que muchas personas ejercen demasiado fuerza sobre los dientes lo que termina dañando el esmalte de estos o la superficie de las encías.

Por su parte, los cepillos eléctricos, con un diseño compuesto por un cabezal automático que hace movimientos de rotación oscilatoria u de oscilación hacia atrás y adelante, garantizan una mayor practicidad. Permiten limpiar los dientes de manera más efectiva al contar con vibraciones que reducen de forma exponencial la placa bacteriana y, por otro lado, la presión exagerada sobre las piezas dentales se reduce gracias a sus mecanismos de control que protegen el esmalte dental y evitan la erosión de la superficie. 

Pixabay/jennyfriedrichs

Otro de sus beneficios es que su mango suele tener una longitud superior a la de los tradicionales, lo que facilita que lleguemos con ellos a todas las zonas de la cavidad bucal.

Pero, al igual que en el caso del cepillo tradicional, en los eléctricos sus principales ventajas también son sus desventajas ya que, al contar con estos movimientos automáticos pueden resultar más agresivos y molestos en casos de personas que padezcan de encías sensibles.

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¿Cuál es mejor?

Los cepillos de dientes eléctricos consiguen una más profunda y eficaz limpieza gracias a sus rápidas oscilaciones, que han demostrado mejores resultados a la hora de reducir la placa.

Si lo que nos preocupa de los cepillos eléctricos es su presión o que nos pueda hacer daño, comentar que estos se clasifican en dos tipos: giratorios, aquellos que solo tenemos que desplazar en contacto con los dientes y son menos agresivos, y sónicos y ultrasónicos, se mueven a velocidades mucho mayores y consiguen una mayor limpieza en profundidad, evitando la aparición de bacterias y con ello posibles enfermedades gingivales. Por otro lado, y lejos de lo que se pueda pensar, los eléctricos se pueden usar tanto en casos de ortodoncia Invisalign, tradicional, como en casos de carillas o empastes.

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Sin embargo, no podemos clasificar entre mejores y peores, ya que la elección dependerá del caso del paciente. Por ello y para saber con certeza cuál es el mejor para nosotros, deberemos acudir a un profesional odontológico que será el que nos indique la opción correcta basado en nuestro caso personal.