Se acerca el reto más difícil del año. El manequin challenge o cualquier otro calambrazo viral no es nada comparado con salir indemne de la Navidad. Espero que te sea más fácil con estos consejos.

1. No leas ningún artículo titulado "Diez consejos para…", ni siquiera este. Odia el decálogo: es el más viejo truco de marketing desde los Diez Mandamientos. Ninguno tendrá previstos los derroteros que tomará tu familia. Es imposible.

2. Cree en la Navidad. La chocolatería de San Ginés, la obra de teatro infantil en familia, montar el árbol de Navidad, el pasodoble de la abuela, el vinilo de Peter Pan, tu hijo de puntillas echando al buzón la carta a los Reyes Magos, la certeza de que Campanilla vendrá a espolvorearte polvo de hada. Y volarás.

3. Detesta la Navidad. Una cola de dos horas en la chocolatería, una discusión porque los niños no quieren ir al teatro (huy, ya no son niños), desmontar el árbol de Navidad que ningún año cabe en la caja de la que salió, la poligonera que te empuja en los grandes almacenes. Que te digan: define "vinilo".

4. Entristécete. Ya sabes de antemano todo lo que te va a faltar en la cena de mañana. Tu abuela no volverá a bailar el pasodoble; nadie cree que seas una reina maga; Campanilla no vendrá; no volarás. Y comprar ilusión ahora te sale a 20 euros el décimo. Ve entristeciéndote. Eso que llevas hecho.

5. Siente la alegría de la Navidad. Ya sabes a quién vas a tener en la cena de mañana. Y además sabes que llegará un día en que echarás de menos a alguno en una cena parecida, o quizá algo más triste. Empieza a alegrarte ya de verlos mañana. Disfrútalos. Es aquí y ahora.

6. Vive la poesía de la Navidad. Mañana, en gran parte del mundo, todos pensaremos un rato en nuestra humanidad común, en lo fácil que sería la vida con más amor, en lo vulnerables que somos. Es el único día que puedes pronunciar la palabra "paz" sin haber ganado un concurso de belleza.

7. Resígnate a la prosa de la Navidad. Todos tenemos cuñados que nos explican cómo se cuece en realidad el gambón. Sí, todos los años, no falla. Sí, sí, con el mismo tutorial de cocer gambones de YouTube que ya has visto.

8. Enfúndate el ‘glamour’ de la Navidad. Cómprate ese vestido que te sienta de muerte. Son días de fiesta, tienes permiso, y ponerte guapa te hará sentir muy bien.

9. Sé práctica con la Navidad. El vestido de hace tres años te sigue valiendo. Total, te lo va a quemar tu suegro con un cigarro, salvo que esté tapado por el delantal.

10. Piensa que, pase lo que pase, tus amigos seguirán ahí el siete de enero.