Carlos Balado Director General de Eurocofin
OPINIÓN

El Turismo en el mundo de la despoblación y la saturación

Fotografía de la calle Preciados, una de las principales arterias comerciales del centro de Madrid, repleta de gente.
Fotografía de la calle Preciados, una de las principales arterias comerciales del centro de Madrid, repleta de gente.
JORGE PARÍS
Fotografía de la calle Preciados, una de las principales arterias comerciales del centro de Madrid, repleta de gente.

Desde comienzos de este siglo el turismo es uno de los principales motores económicos en todo el mundo. La mayor oferta de transporte y alojamiento junto a la expansión de las clases medias ha propiciado que el número de turistas internacionales se haya doblado en los últimos 18 años hasta alcanzar los 1.400 millones según la Organización Mundial del Turismo.

Supone cerca del 12 por ciento Producto Interior Bruto global (PIB). Al generar en el ejercicio pasado 1,7 billones de dólares en ingresos, el turismo internacional se sitúa como la tercera mayor categoría de exportación, detrás de los combustibles, 2,4 billones de dólares y los productos químicos, 2,2 billones de dólares. En las economías avanzadas, el crecimiento del turismo ha reducido la brecha con las exportaciones de productos automotrices. En definitiva, el turismo internacional representa el 29% de las exportaciones mundiales de servicios y el 7% de las exportaciones totales.

España forma parte relevante de este fenómeno, y mientras en 2001 visitaron nuestro país 48,6 millones de turistas extranjeros, en 2019 las llegadas han superado 82,8 millones de personas.

Nuestro país se ha consolidado como el segundo destino favorito, únicamente por detrás de Francia, debido a la conjunción de factores tradicionales, como el atractivo natural y cultural, con la de otros tales como la seguridad y las infraestructuras.

 En 2019, en nuestro país, las llegadas de turistas extranjeros han superado los 82,8 millones de personas.

Los rasgos más característicos que se identifican positivamente con España -aparte de su producto típico de sol y playa- son el clima, una excelente gastronomía, la variedad de oferta y actividades disponibles, la historia, tradición y cultura existentes, la importancia del idioma español y el agradable y hospitalario carácter de los españoles. Como se puede ver, todas ellas tienen que ver sobre todo con el legado o la herencia, pero también la mejora de ese patrimonio realizada en toda España ha sido por lo menos, notable, con acciones específicas que han mejorado lo recibido.

España también es objeto de una serie de críticas muy concretas e insistentes en prácticamente todos los mercados internacionales que se analizan, tales como la saturación turística, el excesivo urbanismo de la costa española, la escasa publicidad en el ámbito internacional de las alternativas turísticas al sol y playa, además de información escasa sobre otras regiones o ciudades españolas que no sean las propias de la costa o Madrid y Barcelona.

En el peor de los casos, se ha creado la imagen de una doble España: la España de los españoles y la España para los turistas.

La herencia no se va a perder, pero la tendencia del mercado es a una competencia mucho mayor, facilitada por la desintermediación en el comercio turístico e impulsado por la tecnología y un cambio social que da prioridad a las experiencias frente a las propiedades.

Hay escasa publicidad en el ámbito internacional de las alternativas turísticas al sol y playa

El poder adquisitivo de las personas a nivel mundial está creciendo y para 2030, mil millones de personas más formarán parte de la clase media mundial, toda vez que los viajes son más accesibles.

Más población dispuesta a recorrer todos los lugares del mundo que responden a la recomendación de “no te lo puedes perder” y a la expectativa generada de su acceso es ilimitado, crea una presión social creciente que desemboca en la saturación.

Disfrutar de la Alhambra, físicamente pegado a otros, o de los pueblecitos de la Toscana, casi en procesión, o apreciar la sensación de grandeza de una catedral española, un museo, a la piedad de Miguel Angel, entre desconocidos que gritan a otros desconocidos, es una experiencia agobiante.

El exceso de turistas genera varios problemas. Los residentes locales, que sienten que han invadido el lugar donde viven, pierden sensación de pertenencia. Se deteriora la experiencia turística, se sobrecarga la infraestructura, se generan daños a la naturaleza y riesgos para la cultura y el patrimonio.

En el caso de España estas cuestiones se agravarán, porque no sólo va a mantener su liderazgo, sino que la ventaja competitiva en el turismo, que además de actuar como palanca de desarrollo de otros sectores, exige avanzar continuamente.

Playa de Levante de Benidorm (Alicante).
Playa de Levante de Benidorm (Alicante).
ARCHIVO

Hay que ser conscientes de que Europa se mantendrá como principal destino de los viajes realizados, con 717 millones de visitas, seguida de Asia, con casi 400 millones de viajes.

Por tanto, determinar en primer lugar cuáles de estos problemas son más acuciantes será el primer paso para encontrar una solución.

Periodificar las llegadas de visitantes evita el desequilibrio que se produce en ciertas temporadas, días de la semana, horas del día o durante eventos importantes. Los lugares de destino han de equilibrar estos desfases para que las comunidades y los negocios puedan continuar cosechando los beneficios del turismo.

Por otra parte, establecer precios suele ser una manera efectiva de alinear la demanda y la oferta. Pero mientras el aumentar los costes de visitar un destino o sitio puede limitar el número de visitantes, también debe considerarse la percepción de elitismo y la posibilidad de que los turistas locales no tengan acceso a su propio patrimonio.

Asimismo, la distribución geográfica de visitantes permite a los turistas moverse de una manera más uniforme a través de áreas residenciales y poco visitadas, e impiden cuellos de botella en lugares con exceso de visitantes.

De hecho, la gestión del turismo puede abordar el problema de despoblación de España, porque existe una oferta que no se conoce y, por tanto, no se puede apreciar, y hay una demanda que no sabe que esos lugares están disponibles y tienen mucho que ofrecer. Todos lo agradeceremos.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento