Los montañeros saben que la mayoría de los accidentes se producen en el descenso. Por el cansancio y porque se baja la guardia. La vuelta a la actividad en los tiempos de la Covid-19 debe hacerse con test suficientes y mascarillas adecuadas y con responsabilidad ciudadana. Sin la confusión que refleja el lío de las clasificaciones de pruebas de detección y sin oscurantismo. Y, sobre todo, aunque parezca imposible, sin banderías partidistas.