El presidente de Yemen, Ali Abdalá Saleh, ha realizado un llamamiento a sus seguidores para que garanticen la seguridad y la estabilidad del país y resistan "todos los desafíos" que se presenten para evitar "el caos y el derramamiento de sangre".

El dirigente, en el poder desde la unificación del norte y el sur, en 1990, ha dado un mitin en una plaza de la capital Saná, que desde enero pasado es el escenario de manifestaciones que piden el final de su régimen y la ejecución de profundas reformas políticas.

"Vosotros sois la seguridad de la patria, el ejército de la patria", afirmó el gobernante, que se presentó ante miles de personas mientras en otra plaza grupos de la oposición mantenían las protestas políticas que estallaron al calor de las revueltas populares de Túnez y Egipto.