El índice de rendimiento académico en la Universidad de Castilla-La Mancha supera en cinco puntos el que presenta la media de las universidades públicas presenciales, de forma que los estudiantes de la UCLM aprueban el 68,66% de los créditos en los que se matriculan, frente al 63,81 del resto.

Los resultados son aún mejores si se consideran sólo las carreras sanitarias, en las que la UCLM obtiene un rendimiento académico del 88,05%.

Estos son algunos de los datos de 'La Universidad española en cifras', el estudio que ha dirigido el profesor de la Universidad de Jaén Juan Hernández Armenteros y que recoge los principales indicadores universitarios referidos a la actividad académica, productiva y financiera de las universidades españolas en el año 2008, según ha informado en nota de prensa la universidad.

El propio Armenteros ha presentado en Ciudad Real las principales conclusiones del informe respecto a la Universidad de Castilla-La Mancha, en una comparecencia conjunta con el rector de la institución académica, Ernesto Martínez Ataz.

Atendiendo al capítulo de investigación, la Universidad de Castilla-La Mancha aparece por encima de la media en lo que respecta a los ingresos presupuestarios por profesor equivalente a tiempo completo.

Además, el profesorado de la UCLM ha mejorado en ocho puntos la productividad financiera derivada de la actividad investigadora en los años 2000 a 2008, alcanzando valores equiparables al promedio del sistema universitario público español.

En cuanto a los criterios de producción científica, la UCLM aparece en el puesto 17 de entre el conjunto de universidades públicas presenciales, mientras que se localiza en el 19 si se observa la producción investigadora (los sexenios).

La Universidad castellano-manchega también supera la media nacional en lo que respecta a los índices de satisfacción de la primera opción de los estudiantes. En la UCLM, el 85,40% de los alumnos cursan su carrera preferida, frente al 79,37% del sistema universitario público presencial español. Estas buenas cifras son atribuibles -según Hernández Armenteros- a un modelo de proximidad al usuario de los servicios académicos y al incremento de la oferta universitaria, en la que el profesor también aprecia inconvenientes como el "exceso de capacidad productiva"; es decir, el desequilibrio entre la oferta y la demanda de plazas en determinadas titulaciones.

De hecho, 'La Universidad española en cifras' confirma que la universidad pública se caracterizó entre 2000 y 2008 por un exceso de oferta académica y de carga docente en los planes de estudio, con un 42% de enseñanzas que tuvieron menos de 50 alumnos de nuevo ingreso en el curso 2008-2009.

Sin embargo, la adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior (EEES) ha supuesto una reducción del 11 % de las enseñanzas ofrecidas por el conjunto de universidades públicas y privadas, según estima el profesor Armenteros, lo que contribuye a reducir esta brecha.

Por otro lado, el informe alude al crecimiento que experimentó la UCLM entre 2000 y 2008 en sus plantillas de profesorado y de personal de administración y servicios, "en consonancia con las variaciones al alza que ha registrado su oferta académica" y que se traduce en la reducción de la ratio estudiantes-profesor hasta situarse en 14 estudiantes por cada docente, similar a la media del sistema universitario público presencial de España, que se encuentra en 12 estudiantes por profesor.