La asociación Cercle Obert ha señalado este jueves que el proyecto de construcción del nuevo Pont de Fusta "no es una obra necesaria" para la ciudad de Valencia, ya que "no va a contribuir a la pacificación del tráfico ni a la conservación y disfrute del Patrimonio Cultural Valenciano" y, además, "no se ajusta a la legalidad", por lo que el colectivo exigirá la paralización de las obras.

Según ha informado en un comunicado, el proyecto "no se ajusta a la legalidad, a pesar de los insustanciales y contradictorios argumentos que emplea Patrimonio y Territorio y Paisaje para justificar una intervención innecesaria, inoportuna, costosa y absurda".

Por ello, la entidad ha anunciado que ofrecerá un análisis jurídico de las "lagunas y contradicciones" que existen en los informes remitidos por el Ayuntamiento de Valencia, la Dirección General de Territorio y Paisaje y la Dirección General de Patrimonio Cultural, exigiendo la paralización inmediata de las obras ante los organismos correspondientes.

A su juicio, el proyecto no va a contribuir a la pacificación del tráfico ni a la conservación y disfrute del Patrimonio Cultural Valenciano, sino que el desvío de tráfico rodado previsto "provocará nuevos y graves problemas al abandonado y degradado centro histórico de Valencia".

"La mejor forma de proteger los puentes históricos, las Torres de Serranos y el muy degradado centro histórico de Valencia no es creando una nueva vía de circulación en un nuevo puente, que desemboca directamente en la peatonal calle Navellos", ha agregado Cercle Obert.

La entidad ha resaltado que la Dirección General de Patrimonio Cultural Valenciano ha autorizado la construcción de un nuevo puente, con el diseño proyectado por José María Tomás Llavador, Juan Francisco Moya Soriano e Ignacio Company, en sustitución de la vieja pasarela peatonal del Pont de Fusta, ofreciendo unos argumentos que la asociación ha tildado de "insignificantes".

En este sentido, lamenta que el informe no cuestione "el daño y lesiones que puede provocar la construcción e impacto de un macropuente de tres vías a escasa distancia de otros dos puentes históricos, ignorando la remodelación de tráfico rodado planteada por el Ayuntamiento de Valencia y que generará nuevos problemas en la actual puerta de entrada al centro histórico".

Cercle Obert ha insistido en que las intervenciones que se plantean por las instituciones públicas deben ser siempre "conservadoras y muy respetuosas con la normativa legal, evitándose construcciones y actuaciones que alteren o desnaturalicen la contemplación de nuestros conjuntos históricos protegidos".

Por ello, incide en que las intervenciones nuevas o rehabilitadoras de carácter urbanístico "deben aspirar a que los elementos históricos, artísticos y ambientales se conserven en su integridad, facilitando su contemplación desde todos los ángulos".