Javier Cases defiende el patrocinio del Mallorca Classic y señala que Flaquer le ordenó darle forma jurídica

Eduardo Gamero niega cualquier tipo de participación en el convenio
Gamero hablando con uno de los abogados
Gamero hablando con uno de los abogados
EUROPA PRESS
Gamero hablando con uno de los abogados

El que fuera secretario general técnico de la Conselleria de Turismo en la pasada legislatura del PP, Javier Cases, ha defendido ante el juez instructor del caso Ibatur la forma como se tramitó desde el Instituto Balear de Turismo (Ibatur) el patrocinio del torneo de golf Mallorca Classic, que se encuentra bajo investigación judicial a raíz de las numerosas facturas halladas sin justificar relativas a este convenio, al que el Ejecutivo autonómico destinó cerca de 17 millones de euros.

Durante su comparecencia en calidad de testigo ante el titular del Juzgado de Instrucción número 2, Juan Ignacio Lope Sola, Cases ha aseverado que su intervención en el convenio de patrocinio se limitó a comprobar que esta fórmula estaba "correcta desde el punto de vista jurídico" y adaptarlo desde el punto de vista promocional a las instrucciones recibidas por parte del ex conseller de Turismo, Joan Flaquer.

Y es que, tal y como ha apuntado en su declaración, tuvo noticia del convenio cuando le llamó el entonces director general de Promoción Turística, Eduardo Gamero, en cuyo despacho conoció al gerente de Pula Golf -donde se celebró el torneo-, Romeo Sala, quien llevó el borrador del convenio y fue quien "principalmente dio las explicaciones". Es más, ha señalado que las cantidades acordadas "venían en la propuesta" aunque ha precisado que éstas se ajustaban "al precio de mercado". "No era mi cometido comprobarlas", ha recalcado al respecto.

En cualquier caso, y a pesar de que la elaboración del convenio fue "tan rápida porque las fechas del torneo ya estaban señaladas", ha aseverado que los objetivos del patrocinio de cara a promocionar Mallorca se cumplieron "sobradamente". Para ello, el Ibatur destinó en concreto 1,1 millones en 2003, 2,3 millones en 2004, 3,4 millones en 2005, y 4,6 millones de euros tanto en 2006 como en 2007, cantidades que fueron invertidas en el convenio del Mallorca Classic, cuya organización corrió en concreto a cargo de las empresas Match Golf Consulting y Real Pula Golf, vinculadas a Sala.

De forma paralela, el ex alto cargo del PP ha sido preguntado sobre sus estancias en uno de los hoteles de Sala, otra de las líneas de investigación abiertas, y en este sentido ha negado que acudiese en calidad de invitado sino que siempre las pagó. "Estuve tres o cuatro veces y siempre pagué en efectivo", ha incidido.

Cabe recordar al respecto que al empresario se le investiga por haber beneficiado, como compensación por el dinero abonado por el Govern al patrocinio de la competición de golf, a la ex vicepresidenta del Ejecutivo, Rosa Estaràs, al ex presidente Jaume Matas, al ex presidente de la Generalitat Valenciana, Eduardo Zaplana, y a otra decena de ex altos cargos 'populares' con invitaciones en uno de sus hoteles cuyo valor total ascendería a al menos 35.676 euros.

En este sentido, un oficio de la Policía Nacional remitido a esta compleja causa, al que tuvo Europa Press, revela de forma minuciosa las cantidades que el establecimiento no habría facturado a los anteriores invitados entre 2004 y 2010 y que la Policía estima que serían aún más elevadas si se suman los servicios extras. Es más, los investigadores apuntan a que en el listado de clientes alojados aparecen otros con la leyenda 'invitados Romeo', lo que obedecería a un "deseo de ocultar su verdadera identidad" por poder tratarse de personas de "mayor calado político" que los anteriores.

Gamero "nunca" habló con flaquer de este patrocinio

Por su parte, también este miércoles ha sido interrogado como testigo Eduardo Gamero, quien ha negado haber participado en el convenio como tampoco ha afirmado recordar si llamó a Cases para hablar del torneo. "Puede que le llamara, pero de ninguna forma he participado en el convenio", ha espetado en este sentido el ex director general, quien ha asegurado que nunca habló con Flaquer de este patrocinio. "El conseller no me informaba de las líneas maestras, mi función era la representación institucional", ha remarcado.

Es más, el testigo ha recordado que conocía los programas y actividades del Ibatur pero "no participaba en la toma de decisiones". Finalmente, ha manifestado no haber estado nunca en Pula ni haber tenido relación con Romeo Sala.

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