El Ministerio de Trabajo celebrará este martes una reunión con la dirección de Nueva Rumasa y representantes de UGT y CCOO para abordar la situación que atraviesan las empresas del grupo y analizar las medidas que se pueden adoptar de acuerdo con la legislación laboral para atenuar las consecuencias sobre los trabajadores.

Al encuentro, convocado a partir de las 9,30 horas en la sede de la Dirección General de Trabajo, asistirán el responsable de esta área del Ministerio, Raúl Riesco; el director general de la Tesorería de la Seguridad Social, Javier Aibar, y el director del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), Juan Pedro Serrano, según han indicado a Europa Press fuentes del Ministerio.

En esta reunión 'multilateral', se expondrán las medidas que contempla la ley para atenuar el impacto de la crisis del grupo sobre el empleo de las empresas que aún no han entrado en situación concursal. Según los sindicatos, Nueva Rumasa adeuda a los trabajadores de sus empresas alimentarias unos seis millones de euros.

"Se trata de juntarnos todos por primera vez para hablar también de futuro, que ya toca", dijeron a Europa Press fuentes de la Federación Agroalimentaria de UGT.

Por su parte, la Federación Agroalimentaria de CCOO explica que el objetivo es "encauzar soluciones globales que permitan a los trabajadores acceder a las prestaciones salariales vía expedientes de regulación de empleo (ERE) temporales". Por el momento, sólo Clesa ha presentado expedientes, de seis meses de duración, en sus plantas de Madrid y Pontevedra, así como en su filial de helados Royne.

Esta reunión se celebra después de la que mantuvieron la semana pasada los sindicatos con responsables del Fondo de Garantía Salarial (Fogasa), que se ha comprometido a asumir las deudas salariales que tiene pendiente Nueva Rumasa con los trabajadores de las empresas que se han declarado en concurso de acreedores hasta un máximo de 150 días y no más del doble del salario mínimo interprofesional.

Además, los sindicatos también se entrevistaron hace unos días con la ministra Rosa Aguilar para buscar soluciones a las empresas alimentarias de la familia Ruiz-Mateos, que suman casi 4.000 puestos de trabajo.

Nueva Rumasa tiene una treintena de empresas en situación 'preconcursal' y, hasta el momento, ha declarado en suspensión de pagos a las firmas Dhul, Carcesa, Clesa y Cacaolat, a las que se sumarán previsiblemente esta misma semana cuatro empresas bodegueras de Cádiz.