El presidente de CEOE-Cepyme Cantabria, Miguel Mirones, continuará al frente de la organización patronal ya que la petición de cese temporal realizada por 29 integrantes de la Junta Directiva no ha llegado siquiera a votarse en la reunión extraordinaria de este viernes, ya que no se ajustaba a los estatutos de la confederación empresarial.

Así lo ha señalado en rueda de prensa el propio Mirones, quien ha explicado que el informe elaborado por Garrigues indicaba que cuatro de los puntos incluidos en el orden del día de la reunión de la Junta no se ajustaban a los estatutos.

En concreto, se trata de los puntos que planteaban el cese temporal de Mirones y del Comité Ejecutivo por el tiempo que se prolonguen los trabajos de la Comisión de Investigación, así como la creación de sendas comisiones gestoras que ejercieran sus funciones durante la suspensión temporal.

"Si me muevo un ápice, mañana me puedo encontrar con una nueva denuncia", ha dicho Mirones en una posterior rueda de prensa en la que ha asegurado que, cuando hay personas que están dispuestos a "llevarle permanentemente" a llevarle los tribunales, no le "queda más" que ser "absolutamente respetuoso" y "exquisito" en el cumplimiento de los estatutos.

Por lo tanto, ha asegurado que la organización seguirá funcionando "exactamente igual" que hasta ahora y cada órgano mantendrá las competencias que le corresponden, al igual que la Comisión de Seguimiento seguirá haciendo su trabajo a la espera de los resultados de la auditoria para la que —ha dicho— ya faltan "muy pocos días".

La Comisión de Seguimiento estableció que la auditoria encargada a la consultora Deloitte tenía que estar lista y presentada, como máximo, el 30 de marzo.

Mirones ha abogado por esperar al resultado de la auditoria y ha señalado que, sin "ninguna duda", si el informe encargado detectase que ha cometido irregularidades "el primero que saldría de la organización, sin que nadie se lo pidiera, sería él".

El presidente de la CEOE ha insistido en su inocencia y ha dicho que "está seguro" de que los hechos denunciados por el secretario general, Yves Díaz de Villegas, el pasado 22 de febrero en una carta, además de las posteriores acusaciones de falsificación de su firma en documentación de la organización, no responden a la realidad.

Ha recordado que, por este motivo, ha presentado una querella contra Díaz de Villegas por injurias y calumnias.

Cuestionado sobre si no hubiera sido "moral y ético" permitir el debate sobre su cese temporal, Mirones ha señalado que sobre la ética hablar tras conocer los resultados de la auditoria.

"Primero hay una auditoria que es la que tiene que juzgar si los hechos son ciertos o falsos. Sobre la ética habrá que hablar a posteriori", ha dicho Mirones, quien ha opinado que cualquier actuación en otro sentido "sería prejuzgar algo".

Mirones se ha vuelto a quejar de que Díaz de Villegas no utilizara los órganos de gobierno de la CEOE para dirimir estos asuntos dentro de la organización.

Además, ha explicado que durante la reunión de este viernes se ha preguntado a los miembros del Comité Ejecutivo asistentes si el secretario general les había trasmitido algunos de los hechos que denunció en su carta el pasado 22 de febrero, algo que, según ha asegurado, negaron todos los presentes.

En su opinión, la actuación de Díaz de Villegas ha generado un "problema", cuyas responsabilidades —ha dicho— deberán ser "asumidas por la persona que lo ha provocado".

Prueba pericial caligráfica

Por otra parte, Mirones ha explicado que, durante la celebración de la Junta Directiva, la directora del Departamento Jurídico y de Relaciones Laborales de CEOE-CEPYME, María Dolores Ruylópez, señaló que había encargado una prueba pericial caligráfica de las firmas que, según el secretario general, habían sido incluidas sin su permiso y escaneadas en documentos de la organización.

Según ha explicado el presidente de la patronal, la prueba ha determinado que la firma incluida en el documento que se presentó al Protectorado de Fundaciones, en el que se fijaba el quórum en el que se tomó el acuerdo y las razones por las que se llevó a cabo la ampliación de los fines fundacionales de la Fundación Servicios Empresariales de CEOE para que pudiera encargarse del PSIR de Liébana, era original de Díaz de Villegas.

Ha considerado que esta prueba "deja claro" que no ha existido "ningún tipo" de falsificación.

Tres apoderados

Por otra parte, Mirones ha anunciado que esta viernes ha dado poderes a tres miembros del Comité Ejecutivo, concretamente a Antonio Fernández Rincón, Javier Polidura y Carmen Carrión- para actuar en su lugar en la gestión ordinaria de ámbito administrativa o económica de la organización.

Sin embargo, ha asegurado que esto no significa una delegación de estas competencias, si no que hay otras tres personas más que puedan hacerlo, un poder que ya tenía Díaz de Villegas.

En la Junta Directiva celebrada este viernes han participado 72 miembros de la Junta Directiva, 58 más 14 votos delegados, y se han instalado inhibidores de frecuencia para evitar filtraciones a la prensa.

Diálogo "distendido"

Mirones ha señalado que al finalizar la reunión ha podido hablar con varios miembros de algunas de las 29 asociaciones que pidieron su cese temporal, un diálogo "absolutamente distendido", "tranquilo y cordial".

Ha explicado que han hablado sobre la situación que está viviendo la CEOE, de la que —ha dicho— "no está muy satisfecho", y han quedado en "seguir charlando" en los "próximos días".