La Guardia Civil ha intervenido en el puerto de Melilla 470 kilogramos de hachís en el interior de dos bateas con destino a la Península, una de las aprehensiones de droga más importante del año en la ciudad autónoma.

La actuación fue desarrollada por efectivos de la Sección Fiscal del Muelle y del Servicio Cinológico, en colaboración con la Policía Portuaria, durante un minucioso registro de las bateas que iban a embarcar de retorno con destino a la península.

El portavoz de la 2006 Comandancia ha señalado que en la realización de "este servicio ha sido fundamental la colaboración de la Policía Portuaria, que advirtió a la Guardia Civil de un hecho observado que le infundió sospechas y que a la postre ha sido la pista que ha determinado el registro a fondo de varias bateas que se encontraban estacionadas en el parking habilitado".

En una de ellas, los agentes localizaron la droga bajo su techo un doble fondo "muy bien construido y novedoso", tanto por el sistema de construcción, como para su aislamiento, así como para la colocación de los paquetes de droga, en cajones metálicos, ubicados sobre rieles, para su posterior extracción al tirar de unos cables. En el interior de ese doble fondo hallaron multitud de paquetes con droga, que alcanzó una cantidad cercana a los 230 kilogramos.

Dentro de otra batea próxima, los guardias civiles descubrieron diversos enseres como maletas y cajas de cartón tras palets de madera utilizados para el transporte de mercancías, en cuyo interior descubrieron 240 kilogramos de droga, siendo las características de los paquetes en que iban distribuidos similar a los de la primera.

La Guardia Civil sospecha que iban a ser introducidos en el doble fondo del techo de la batea y que pertenecen a la misma organización. En total han sido 470 kilogramos de droga los intervenidos en esta actuación, del tipo "hachís", sin que se hayan producido detenciones por este servicio, aunque la Guardia Civil investiga para poder dar con el autor o autores de este intento de tráfico de drogas.