Los partidarios del cese temporal de Miguel Mirones como presidente de CEOE-Cepyme Cantabria han abogado este miércoles por la renovación de los órganos directivos de la patronal y por la aprobación de un código ético de conducta interna.

No obstante, de momento no van a solicitar la convocatoria adelantada de elecciones porque, aunque los estatutos de la organización contemplan esa posibilidad, prefieren esperar a conocer los resultados de la comisión de investigación antes de decidir cuáles serán sus próximos pasos.

Por lo pronto, creen tener una "amplia mayoría" para que este viernes se apruebe en la Junta Directiva la petición de cese temporal de Mirones, una cuestión que, en todo caso, depende en última instancia de lo que decida el propio presidente de la organización patronal, ya que estatutariamente no se prevé esa posibilidad de pedir el cese temporal. De todas maneras, confían en que Mirones asuma la petición si se aprueba por la Junta Directiva.

Así lo han afirmado en una rueda de prensa a la que han asistido una veintena de las asociaciones firmantes de la petición de Junta Extraordinaria, en la que han dejado claro que no responden a intereses de nadie ni aspiran a ocupar cargo alguno. "Nadie está detrás de nosotros y no tenemos ninguna pretensión de ocupar ningún puesto, ni siquiera en el Comité Ejecutivo", han enfatizado.

Es más, han recalcado que están teniendo "especial celo" en mantenerse "al margen" de cualquier otro movimiento surgido en los últimos días, han rechazado cualquier alusión a partidos políticos y han señalado que se mantendrán "vigilantes" para que "nadie" trate de aprovecharse de su movimiento "para fines particulares".

En la rueda de prensa, en la que han intervenido tres de los integrantes del colectivo y, también, desde el público, otros de los empresarios, han leído un manifiesto conjunto en el que subrayan que son un "movimiento espontáneo y de base democrática" que apuesta por abrir un debate que conduzca hacia una nueva CEOE-Cepyme Cantabria, "basada en la ética y la transparencia".

"Lo último que pretendemos es desestabilizar el funcionamiento de nuestra organización", han agregado los empresarios, quienes opinan que todo este asunto debería haberse "arreglado" dentro del Comité Ejecutivo, como intentó en tres ocasiones el secretario general, Yves Díaz de Villegas.

Tras insistir en que no quieren que la "credibilidad" de la organización sufra "el más mínimo descrédito", han opinado que lo que "realmente desestabiliza" la patronal es que la investigación interna "pudiera verse manchada de falta de transparencia y limpieza por la obstinación de las personas mencionadas" en la denuncia de Díaz de Villegas al permanecer al frente de la organización durante la investigación.

Por eso han pedido una reunión extraordinaria de la Junta Directiva, ante la "necesidad obvia" de que "la totalidad de las personas y órganos implicados directa o indirectamente" en las supuestas irregularidades denunciadas "se aparten completamente de sus funciones, de forma temporal", para dar "un mínimo grado de transparencia y credibilidad" a los trabajos de la comisión.

En este sentido, este grupo de empresarios no sólo solicita el cese temporal de Mirones, sino también del Comité Ejecutivo en su conjunto, ya que algunas de las decisiones que se han puesto en cuestión con la denuncia de Díaz de Villegas pasaron por dicho órgano. LEGAL,

Pero no ético

Reconocen que todas las denuncias planteadas por el secretario general, salvo "una o dos cosas", estarán "con mucha probabilidad" dentro de la legalidad, pero eso, a su juicio, no implica que sea ética la forma de actuar.

De ahí su apuesta por abrir un debate para analizar "si es aceptable desde el punto de vista ético un sistema de funcionamiento que permite que se hayan producido" esos acontecimientos.

En esta línea, han hecho un "llamamiento" a todas las asociaciones y empresas miembros de la organización para iniciar un "proceso de transformación" en torno a cuatro pilares, el primero de ellos, la modificación de los estatutos aprobados en mayo de 2008 "rediseñando el actual modelo".

Junto a esto, abogan por la aprobación de un código ético de conducta interna; por el "rediseño" del sistema de gestión interna de la organización, "bajo el consenso de todas las organizaciones integradas"; y por la "reunificación de todas las organizaciones patronales" de la región en torno a una "organización sólida, independiente y dotada de la máxima credibilidad ante todos los agentes económicos y sociales de Cantabria".

Desde su punto de vista, esta transformación deberá "acometerse sin dilación" y acompañada de un proceso democrático de renovación de los órganos directivos. Según dicen, "es la hora de la transformación" y, por eso, llaman al resto de asociaciones y empresas a unirse a este movimiento "de base, limpio y democrático, basado en los principios de la ética en los negocios". "INDIGNACIÓN"

Los empresarios, que "pase lo que pase" saldrán de la reunión del viernes "con la cabeza alta" y la convicción del "trabajo bien hecho", han explicado que este movimiento ha surgido por la "indignación" de "buena parte" de los integrantes de la Junta Directiva sobre la forma en que discurrió la reunión del pasado 25 de febrero.

Entre otras cosas, critican que lo finalmente aprobado no tenía "nada que ver" con lo que se planteaba inicialmente en el orden del día y también lamentan cómo fue apartado "brutalmente" el secretario general de la organización, Yves Díaz de Villegas, al que quieren escuchar.

Desde su punto de vista, "de la misma manera" que se apartó a Díaz de Villegas, el presidente de CEOE-Cepyme Cantabria también debería haberse apartado para adoptar "una postura de no influencia" en la investigación de los hechos denunciados.

Y es que, aunque algunos de los empresarios presentes en la rueda de prensa subrayan su "absoluta confianza" en la comisión de investigación y sostienen que Mirones no está "dirigiendo" sus trabajos, hay quienes no comparten esa visión y así lo han manifestado desde las butacas de público.

Por último, preguntados por el hecho de que el presidente de la patronal haya incluido en el orden del día de la reunión de la Junta Directiva cinco puntos adicionales a los solicitados por el colectivo, lo interpretan como una "maniobra de distracción, entretenimiento o cansancio", pero están dispuestos a acudir con el "bocadillo".