El médico del SAMU denunciado por la Fiscalía de Castellón por instalar una minicámara oculta en los baños de mujeres del Hospital General de Castellón para filmar a las ususarias de los servicios se encuentra en libertad con cargos, imputado por un delito contra la intimidad, según han informado a Europa Press fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).

El juzgado de instrucción número 4 de Castellón es el órgano que instruirá este caso, después de la inhibición a su favor del juzgado número 6, que se encontraba de guardia cuando la Fiscalía remitió la denuncia. El TSJCV también ha confirmado que se han efectuado dos entradas y registros relacionados con este asunto.

Las diligencias comenzaron por oficio de la Conselleria de Sanidad el pasado 4 de marzo. Según la denuncia del ministerio público, el médico, que realizó a finales de 2010 y principios de este año sustituciones en una unidad del General, en horario de trabajo, instaló en la Escuela de Enfermería de forma oculta una minicámara en los váteres de mujeres y filmó a quienes usaban esos servicios.

Su compañera sentimental, enfermera del centro, accidentalmente vio el pasado 28 de febrero, en el ordenador portátil del acusado, una carpeta en la que había más de 20 vídeos, en los que se veía "claramente" la cara del autor colocando la cámara oculta, aunque se desconoce el número de mujeres que han podido ser filmadas y el destino que el denunciado haya podido dar a los videos, según consta en la denuncia.

Tales hechos, según el fiscal, pueden ser constitutivos de un delito contra la intimidad del artículo 197 del Código Penal, del que resulta en principio responsable el médico, por lo que, conforme a lo dispuesto en los artículos 773 de Lecrim y 5 del estatuto del ministerio fiscal, dio por concluida la investigación realizada por este órgano y decidió formular una denuncia contra el facultativo.

Por su parte, la Conselleria de Sanidad, a nivel interno, ha excluido de la bolsa de trabajo a este profesional y lo ha apartado de sus funciones, según han informado este departamento de la Generalitat en un comunicado.

La Conselleria ha confirmado que fue un particular quien avisó de que un miembro del Servicios de Emergencias Sanitarias (SES) de Castellón había realizado grabaciones en varias dependencias sin el consentimiento de sus compañeros.

Sanidad ha aclarado que se trata de un médico del SAMU y no del Hospital General de Castellón, aunque sí hacía guardias en la ambulancia SAMU que tiene su base en ese centro hospitalario. Estas habitaciones están en la Escuela de Enfermería, por lo que dormía aquí, pero destaca que el facultativo no tiene relación laboral con la Escuela de Enfermería.

Ante este aviso, la Conselleria de Sanidad, la semana pasada, comprobó los hechos denunciados y tramitó una denuncia a Fiscalía para que realizase la investigación pertinente y estableciese las responsabilidades que puedan derivarse.