El Departamento de Sanidad del Gobierno vasco está estudiando la posibilidad de incrementar de 900 a 1.000 el ratio de niños por pediatra, con el fin de que las 41 consultas de pediatría que actualmente son cubiertas con médicos de familia sean atendidas también por especialistas en medicina infantil.

El director de Asistencia Sanitaria del Servicio Vasco de Salud-Osakidetza, Eduardo Garate, ha informado este martes ante la Comisión de Sanidad del Parlamento vasco sobre las medidas previstas por el Gobierno autonómico para mejorar la atención pediátrica a los 278.000 niños de entre cero y 14 años que hay en Euskadi.

Garate, que ha comparecido ante la comisión junto al consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, ha explicado que Osakidetza tiene 314 cupos o consultas de pediatría, de los que 41 están atendidos por médicos de familia y el resto, por especialistas en medicina infantil.

Además, ha informado de que, de las 180 unidades de atención primaria que existen, tres no tienen plaza de pediatra. Según ha apuntado, el 13 por ciento de la población pediátrica es atendida habitualmente por médicos de familia.

Respecto a la situación de los Puntos Atención Continuada (PAC), ha subrayado que "desde que fueron creados hace 20 años", la atención que se presta a los niños en estos centros corre a cargo "exclusivamente" de médicos de familia.

Garate ha explicado que los pediatras de Osakidetza tienen asignada una media de 900 pacientes, mientras que en el conjunto del Estado español este ratio es de 1.069 niños por especialista.

"los números cuadran"

Según ha apuntado, las previsiones realizadas por el Servicio Vasco de Salud apuntan a que en los próximos diez años serán necesarios 200 especialistas en medicina infantil. Dado que cada año salen del sistema universitario vasco 20 especialistas en pediatría, ha señalado que, al menos en teoría, "los números cuadran" para cubrir esta demanda.

Con el fin de que las 41 consultas de pediatría actualmente son atendidas por médicos de familia, ha explicado que el Departamento de Sanidad estudia la posibilidad de aumentar el ratio paciente-médico a 1.000 niños por pediatra. Esta medida, a la que se ha referido como "una propuesta", no serviría, sin embargo, para garantizar que las sustituciones de estos especialistas fueran cubiertas por pediatras.

Además de esta iniciativa, que según ha afirmado debería aplicarse de forma "gradual", ha explicado que se pretende realizar una "redistribución" de tareas de forma que las enfermeras de pediatría empiecen a asumir nuevas labores.

BENGOA

En este sentido, Bengoa ha afirmado que pese a que los pediatras quieran "mantener el status quo", es necesario "adoptar decisiones" para garantizar la asistencia sanitaria. "Oír que no hay que reducir la edad (de la asistencia pediátrica) y que se quiere seguir en el mismo modelo de hace 30 años, cuando todo está cambiando alrededor, es un poco artificial", ha añadido.

El consejero de Sanidad ha asegurado que lo que se está proponiendo no son medidas "muy agresivas" y ha añadido que aunque se incrementara el número de especialistas en medicina infantil que salen de la universidad cada año, seguiría siendo conveniente "empezar a asignar funciones a enfermería".

Otra de las medidas que está planteándose el Departamento de Sanidad en materia de atención a niños de entre cero y 14 años de edad consiste en la extensión de la teleasistencia a este servicio.