Hasta hace poco, las artes plásticas fueron cosa de hombres. Durante siglos, Occidente apartó de la excelencia en la creatividad a las mujeres vetándoles el acceso a la formación en las distintas disciplinas y despreció la producción de las que, con todo, alcanzaban cierta superioridad.

Ellas sí han tenido su hueco, sin embargo, como objeto de la representación, si bien es cierto que esa representación se ha limitado frecuentemente a reflejarlas en relación con su faceta de madre o considerándolas objetos del amor sensual.

Coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer y en el marco del festival 'Ellas Crean', abre al público mañana Heroínas, una exposición con más de un centenar de obras de arte en las que la mujer desempeña un papel activo.

Repartida entre el Museo Thyssen y la Fundación Caja Madrid –ambos con sede en la capital–, puede visitarse hasta el 5 de junio. Las obras, sobre todo pinturas, datan del Renacimiento en adelante, aunque la mayoría corresponden a la Edad Contemporánea.

Hay figuras mitológicas como Artemisa, Ifigenia y Medea; guerreras como Juana de Arco; místicas como Santa Teresa y Santa Eulalia; y artistas como Safo, Artemisia Gentileschi y Frida Kahlo.

Todas se muestran victoriosas o ejerciendo poder sobre otros o autónomas o retadoras o ingeniosas. Las retratan Caravaggio, Rubens, Rembrandt, Goya... De un tiempo a esta parte, también mujeres retratan mujeres. Mary Cassat, Berthe Morisot y Marina Abramovic son algunas de las que dan prueba de ello.