Carmen Franco, hija del dictador, se puso en contacto con este letrado tras conocer la noticia de que la XVI subasta de esta empresa, el 5 de abril en Sevilla, subastaría tres óleos pintados en Marruecos supuestamente por el general, a 9.000 euros cada uno, firmados bajo el seudónimo de 'Gironés'.

Según dijo Moekel Franco no comenzó a practicar la pintura hasta el año 1943 ó 1944, cuando se aficionó después de que Zuloaga lo retratara.

Asimismo, el general "lo hacía de forma anecdótica y sólo pintaba flores, bodegones y copias de otros cuadros", según comentó al letrado su hija.

En este sentido, el abogado explicó que, según la versión de Carmen Franco, el caudillo pintaba "porque dibujaba bien" y lo hacía "para no permanecer sentado después de la comida" y evitar así dormir la siesta.

Según la familia, las obras que pintaba Franco las firmaba con las siglas F.F. y actualmente están en posesión de los familiares.

En cuanto a cómo AIG atribuyó estas obras a Francisco Franco, Moekel consideró que la casa de subastas ha actuado con "cierta negligencia", puesto que "debería haber hecho alguna indagación y haber consultado con la familia" antes de anunciarlo.

Los cuadros, un regalo para el chófer

El chófer que trabajó para la esposa del general, Carmen Polo, de 1938 a 1960 recibió de manos de ésta, supuestamente, una serie de regalos, entre los que se encontraban los tres paisajes marroquíes, según explicó AIG el lunes.

Luis Vila, el conductor ya fallecido, se los dejó a su hijo, llamado también Luis, que fue quien los entregó a Arte y Gestión, según la versión que Luis Vila hijo, propietario de las obras, narró a Moekel.

"Vila asegura que de veras pensaba que eran de Franco" y, según añadió Moekel, "quiero pensar que todo se ha debido a un equívoco y que no hay mala intención".

No obstante, el portavoz de los Franco reconoció que Luis Vila hijo podría haber informado a la familia del caudillo de que iba a desprenderse de esos cuadros, supuestamente pintados por el general.

Por su parte, agregó el abogado, la hija de Franco no recuerda ningún cuadro firmado por ningún Gironés ni que Carmen Polo hiciera esos regalos, aunque agregó que tampoco lo podría negar, ya que el dictador "recibía muchos presentes, y pudieron desprenderse de algunos" en cualquier momento.

En este sentido, el letrado recalcó que "no negamos que las pinturas pertenecieran a Franco, aunque tampoco lo sabemos, peso sí negamos que fueran obra suya".

Acciones legales

La familia podría tomar acciones legales si Arte y Gestión persiste en atribuir la autoría de los lienzos al general, ya que esto podría considerarse delito de estafa, suplantación o atribución incierta de una autoría, apuntó el abogado.

De otro lado, el director de AIG, Ramón García, explicó que "la actuación de la casa de subastas no ha sido negligente, sino coherente con el planteamiento del propietario, que nos ofrece una gran credibilidad, porque su padre trabajó al servicio de Carmen Polo durante 30 años".

En cualquier caso, anunció que se retirarán los tres lienzos de la subasta de abril hasta que "aparezcan nuevos datos que corroboren la versión del propietario y la autoría de Franco". "Nosotros, como meros intermediarios, creemos que lo oportuno es suspender su venta cautelarmente y esperar, porque el tiempo dará la razón a quien la tenga", añadió García.

A su juicio, "el propietario es honesto y no ha intentado manipular nada".

Asimismo, descartó que esta polémica afecte negativamente a la empresa porque "hemos actuado correctamente", si bien, lamentó "la situación y la polvareda levantada".

            NOTICIAS ANTERIORES