El diputado del PSM Antoni Alorda ha exigido a UM que, en caso de que se confirmen los supuestos delitos que están siendo investigados en el marco de la operación Picnic, depure responsabilidades y devuelva el dinero defraudado a las instituciones públicas.

Así se ha expresado Alorda en declaraciones a Europa Press en referencia a la nueva operación de presunta corrupción que apunta a que Unió Mallorquina presuntamente contrató a través del Instituto Municipal de Formación Ocupacional y Trabajo (Imfof) a una veintena de informadores medioambientales cuya única función era, en realidad, captar afiliados para el partido.

Por otra parte, cabe señalar que el consell polític de UM aprobó este lunes cambiar la denominación del partido por el de Convergència de les Illes Balears, así como fulminar su ejecutiva para nombrar un nuevo consejo de dirección permanente en el plazo de siete días. Asimismo, también se decidió cambiar la ubicación de la sede, después de que la actual fuese registrada el pasado viernes en el marco de la operación anticorrupción Picnic.

En este sentido, Alorda ha valorado que UM haya tomado la decisión de reaccionar ante los casos de corrupción que se han destapado asociados a este partido, si bien ha puntualizado que estas medidas "llegan tarde".

Alorda ha subrayado que el hecho de que la Fiscalía haya pedido una fianza a UM como responsable de estos supuestos delitos "marca un punto de inflexión" que debe servir al partido para que asuma las responsabilidades políticas que correspondan.

En opinión del PSM, en caso de que estos delitos se confirmen, estas responsabilidades políticas pasarían por una regeneración completa del partido, que incluyera un cambio de dirección y de los militantes relacionados con esta etapa y prácticas. Asimismo, considera que UM debería devolver el dinero defraudado a las arcas públicas.

Respecto al cambio de siglas, Alorda ha señalado que al PSM le parece "positiva" esta decisión si con ella UM pretende "superar" su etapa asociada a la corrupción política para emprender un nuevo proyecto totalmente desvinculado de estas prácticas. No obstante, ha matizado que esta medida también puede ser "una estrategia" para no asumir las responsabilidades políticas que se derivan de estos hechos, algo que el PSM "no consentiría", ha apostillado.

En este sentido, Alorda ha remarcado que al fin y al cabo se trata del mismo partido ya que, aunque cambie su denominación, el presidente y la militancia de UM es la misma, por lo que ha resaltado que este cambio de siglas no puede de ningún modo servir para que el partido no asuma sus responsabilidades políticas.

Para Alorda, hay que esperar a comprobar cómo evoluciona el futuro de UM y ver si el partido reacciona ante estos acontecimientos. En este sentido, ha dicho que en la situación actual el PSM no se plantearía alcanzar un pacto con UM, a menos que se llevaran a cabo todas estas medidas de depuración política.

Alorda ha indicado que UM "se está jugando su supervivencia en las instituciones" y ha añadido que "lo más prudente" sería que reaccionara y cambiara de actitud. No obstante, ha apuntado que la intención del PSM actualmente es centrarse en su campaña y no pensar en los posibles pactos futuros.

En cualquier caso, el nacionalista ha agregado que le gustaría que hubiera "una reacción popular" en el electorado ante todas estos los casos de corrupción que se están destapando, ya que, en caso de que "estas prácticas fueran validadas en las urnas" sería algo que la ciudadanía tendría que reconsiderar, ha opinado.