La alcaldesa de Palma, Aina Calvo, ha asegurado este lunes que no tiene el "convencimiento personal" de que UM se haya renovado en el proceso de regeneración llevado a cabo durante los últimos meses y ha advertido que "en estas condiciones" no pactará con el partido regionalista tras las elecciones del próximo mes de mayo.

Tras conocer la detención de la que fuera primera teniente de alcaldesa del consistorio, Cristina Cerdó, Calvo ha dicho "asumir" su responsabilidad, si bien ha remarcado que la ruptura del Pacte con UM en febrero del pasado año supuso "un antes y un después" en la gestión del consistorio.

"No sé qué pasará con esta formación política, están viviendo un momento de mucha convulsión, pero lo que sí sé es que yo no pactaré con una formación política que ha sido capaz de colocarnos a todos en la coyuntura que nos han colocado", ha dicho en referencia a UM.

Calvo, quien ha calificado los hechos de "estremecedores", ha hecho hincapié en que la ruptura del pacto de gobierno se llevó a cabo sólo cuando se tenía una "sospecha" de que había "cuestiones que no se hacían bien" y todavía no conocían lo que se sabe ahora. Si supiesen "una enésima parte de lo que sabemos ahora, no hubiese habido ningún pacto" en el 2007.

La primer edil ha afirmado no sentirse "cómplice de ninguna actuación corrupta". No obstante, después de que el PP haya indicado que Calvo deba asumir las "responsabilidades políticas" que le corresponden derivadas de la contratación de informadores medioambientales por parte del consistorio, la alcaldesa ha reconocido que ésta se aprobó en Junta de Gobierno, si bien tras romper el Pacte y auditar el Imfof, esta decisión "se revocó" el 21 de abril de 2010.

Además, en relación a las críticas de los 'populares', Calvo se ha preguntado cuantas preguntas ha realizado este partido sobre la contratación de los informadores medioambientales, tras las muchas realizadas sobre los dinamizadores lingüísticos.

Días "difíciles y feos" para la política balear

Calvo, quien ha comparecido con el semblante serio, ha lamentado los días "difíciles y feos" que se están viviendo en la vida política balear, acontecimientos que ha lamentado y que ha confiado en que se resuelvan en el menor tiempo posible.

Asimismo ha recordado que tras las elecciones de 2007 hubo diferentes partidos políticos que intentaron cerrar un acuerdo político para gobernar -Bloc, PSOE y PP- y que fue "el no de UM", tras el ofrecimiento por parte del entonces presidente autonómico en funciones Jaume Matas, "lo que abocó a la posibilidad de constituir un pacto entre el resto de fuerzas políticas".

La alcaldesa ha hecho hincapié también en que en Baleares el pacto con UM "ha sido un hecho político que nos afecta a todas las formaciones políticas, pero hay una diferencia sustancial histórica y es que la que yo represento es la que dijo no. Fue el equipo de gobierno que presido el que dijo basta, y fuimos nosotros los que rompimos el pacto cuando tuvimos la más mínima sospecha. Si hubiésemos sabido una enésima parte de lo que sabemos ahora obviamente no hubiese habido ningún pacto".

Críticas del pp

En relación a las críticas por parte del Grupo Municipal Popular que le reprocha gobernar con "votos comprados", la primer edil se ha referido de nuevo a la ruptura del Pacte. "Nadie quiere gobernar en minoría, pero si la estabilidad es a cambio del silencio, la estabilidad no vale".

En este sentido, ha manifestado que el "pacto de silencio se ha roto en este mandato". Tras la expulsión de UM, había "dos caminos" o que se presentase una moción de censura o someterse a una cuestión de confianza. No obstante, éste último suponía dejar la Alcaldía en "manos del PP", cuando este partido había protagonizado "uno de los episodios más vergonzosos de la gestión urbanística". Además, "conocemos sus actuaciones en la gestión de lo público", ha indicado en referencia a la Empresa Funeraria Municipal (EFM) y tampoco "lo deseo".

En este sentido, ha considerado que no debería haber dejado a la alcaldía a un partido que había cambiado de portavoz en tres ocasiones "por las razones que todos conocemos".

Situación heredada que "no desea" a nadie

Calvo ha afirmado que ha "desafortunadamente" ha tenido que denunciar "muchas cosas", algo que continuará haciendo "afecte a quien afecte". Además, se ha referido a la situación "heredada" en el 2007, que obligó a que el actual equipo de gobierno tuviese que "reconducir la gestión urbanística tras tener en manos de un señor que está en la cárcel", ha indicado en alusión al ex regidor de Urbanismo, Javier Rodrigo de Santos.

En este sentido, ha remarcado que el consistorio se encontraba en el puesto número 67 en cuanto a la transparencia, y que actualmente está en el 16, pero que trabajará para que "la dosis" de transparencia mejore aún más.

"Lamento profundamente lo que vivimos pero en la vida política ni todo vale, ni todos somos iguales", ha incidido la alcaldesa, quien, además, ha remarcado que es "tiempo de compromisos", y no "de confusión". Según ella, fue la ruptura del Pacte lo que permite "avanzar" al Ayuntamiento, "pero no es aceptable la demagogia".

"asumo la responsabilidad"

"Asumo la responsabilidad y me reafirmo en todas las decisiones que he tomado, estoy convencida de que la ruptura y el gobierno en minoría supone un antes y un después".

En relación a Emaya, ha recordado que tras la expulsión de UM ofreció su presidencia al PP pero "la respuesta fue no". Además, ha dicho tener una "tranquilidad de conciencia absoluta" y ha vuelto a reclamar la dimisión de la actual vicepresidenta y gerente de la empresa pública, Magdalena Tortella.