Los servicios de Renfe Cercanías de Cantabria se han integrado en la tarjeta sin contacto 'Transporte de Cantabria', un medio de pago que puede utilizarse ya en trenes, autobuses y transporte marítimo. La tarjeta podrá usarse en toda la línea de cercanías entre Santander y Reinosa, que abarca 88 kilómetros y 27 estaciones, y que usan al año una media de 1.100.000 pasajeros, a razón de más de 3.200 al día.

Renfe acometerá en los próximos meses los trabajos necesarios para que sus usuarios puedan usar este medio de pago en sus desplazamientos por la región, lo que supondrá una inversión global de más de un millón de euros, de los que el Ejecutivo cántabro aportará 360.000 hasta el año 2012.

Según ha explicado este viernes el director general de Viajeros de Renfe, Enrique Urkijo, que ha presentado la iniciativa en rueda de prensa junto con el consejero de Industria y Desarrollo Tecnológico de Cantabria, Juan José Sota, el próximo mes de abril, se implantará la tarjeta como medio de pago, tanto en las máquinas autoventa que se van a instalar, como en ruta, a través de los interventores; y a partir de julio, también en las taquillas. En abril de 2012, la tarjeta estará implantada igualmente como título de transporte.

Sota ha destacado la importancia de esta integración en la nueva fórmula de billete electrónico que unifica sistemas de abono en base a la intermodalidad con las tecnologías más avanzadas, de forma que permite viajar en todos los medios de transporte público y por "toda" la comunidad autónoma con un mismo sistema.

Ha añadido que esta actuación se enmarca en el compromiso del Gobierno de Cantabria de potenciar el uso del transporte público de viajeros desde parámetros de "calidad y sostenibilidad", tratando de alcanzar los "máximos niveles" de accesibilidad y movilidad para los usuarios.

El consejero ha señalado que con la incorporación de Renfe, el uso de la tarjeta sin contacto incluye en la actualidad toda la red regional de autobuses, los transportes urbanos de Camargo, Laredo y Santa Cruz de Bezana, el transporte marítimo del arco sur de la bahía de Santander y los trenes de cercanías.

Sota ha recalcado asimismo que la integración de Renfe contribuye igualmente a crear un "marco sostenible", dado que el tren está considerado como una de las formas de transporte de viajeros "más fiable y segura".

Tras agradecer a Renfe su "apuesta" por el transporte "de calidad", el consejero ha asegurado que hoy es un "día importante", ya que se "completa todo el espectro" de medios de transporte en la comunidad con esta tarjeta.

Modernización del transporte

En la misma línea, Urkijo ha agradecido el "impulso" de la Consejería de Industria a la modernización del transporte público, y ha destacado el interés de la Consejería de Industria por implantar esta tarjeta, frente a lo que ocurre en otras comunidades.

Según ha dicho la "tarjeta inteligente" es el "primer paso" para el fomento de la intermodalidad, para la que es "fundamental" una integración física "amable", es decir de fácil acceso, así como de servicios, en cuanto a horarios, y de información de todos los transportes que se van a utilizar, además de un mismo sistema de pago.

Para Urkijo, las ventajas de este sistema son la flexibilidad, al no condicionar el origen y destino del viaje; la comodidad; la rapidez y fluidez, ya que permite el paso de 25 personas por minuto, frente a 15 de la banda magnética, mayor facilidad de recarga, la posibilidad de aplicar descuentos comerciales, una mayor fiabilidad y la reducción de gastos de venta y el disponer de mejor información a la hora de planificar los servicios.