El Departamento de Agricultura y Alimentación del Gobierno de Aragón ha trasladado a los representantes de la Asociación de Productores de Leche de Aragón (APLA), su apoyo en la búsqueda de nuevos canales de comercialización de la leche, después de que Cacaolat, perteneciente al Grupo Nueva Rumana de Ruiz Mateos, les adeude alrededor de dos millones de euros.

El consejero de Agricultura y Alimentación del Gobierno de Aragón, Gonzalo Arguilé, y los directores generales de Fomento Agroalimentario, Pedro Orduna, y de Producción Agraria, Jesús Nogués, se han reunido este lunes con representantes de la APLA con motivo de la preocupación que ha despertado la situación preconcursal que registran varias empresas del grupo Nueva Rumasa. Entre ellas, Clesa, accionista mayoritaria de Cacaolat, con planta en el municipio zaragozano de Utebo.

"Lo que va a hacer el Gobierno de Aragón, igual que ha hecho desde que se suscitó esta crisis de incumplimientos es ir hacia la solución que los mismos productores han pedido, como buscar otros canales de comercialización, intentar garantizar el compromiso -por parte de Cacaolat- de cumplir con lo acordado y, sobre todo, buscar soluciones para que la cabaña no se resienta. Porque no podemos olvidar que los ganaderos tienen que alimentar cada día a sus vacas", ha apuntado el director de Fomento Agroalimentario a la salida de la reunión.

En este sentido, se ha referido a la mediación del Gobierno de Aragón para facilitar una intervención, "más o menos inmediata", para garantizar ese suministro de pienso vía créditos "que los productores están dispuestos a suscribir", ha aclarado Orduna, al tiempo que ha matizado que no es lo mismo que los suscriban ellos por si solos que con la ayuda del Gobierno de Aragón.