El Gran Teatre del Liceu no tendrá actividad artística en septiembre debido a los recortes presupuestarios aplicados por la Generalitat y el Ministerio de Cultura, que también obligan a iniciar una negociación con el comité de empresa que podría desembocar en un ERE en septiembre, como "última opción".

Así lo ha anunciado en rueda de prensa el director general del Liceu, Joan Francesc Marco, quien ha explicado que los trabajadores deberían recuperar las horas de trabajo de septiembre a lo largo de toda la temporada, lo que implicaría "renunciar" a una serie de derechos que están recogidos en su convenio laboral, ha admitido, aunque ha confiado en que haya negociación.

La situación del Liceu, "muy preocupante", se ha visto agravada repentinamente tras el anuncio de la Conselleria de Cultura, que rebaja una aportación del 15% en esta misma temporada: serán 9.428.000 euros, y lo mismo para la temporada 2011-2012. Este recorte se suma al del 30% que anunció el Ministerio de Cultura el año pasado, que aportará 11.518.000 euros en esta temporada, y 10.238.000 la que viene.

Con estas cifras el Liceu tendrá en 2011-12 un 3,86% menos de presupuesto respecto a este año: dispondrá de 48.417.000 euros, lo que confirma una tendencia a la baja y sitúa al teatro en cifras similares a las de hace diez años.

Títulos comerciales

La principal novedad de la próxima temporada es que no empezará en septiembre, sino en octubre, y que estará plagada de títulos comerciales La Bohème, La flauta mágica y Aida, entre otras, en busca de mayor rentabilidad económica. El telón se abrirá con Fausto, de Charles Gounod: lo que iba a ser una ópera escenificada, será finalmente, y por la crisis, un conjunto de varios fragmentos en versión concierto con dirección musical de Edward Gardner, que debutará en el Liceu.

La inauguración oficial llegará el estreno en España el 19 de noviembre de Le Grand Macabre, de György Ligeti; con dirección escénica de La Fura dels Baus y musical de Michael Boder. El director artístico del Liceu, Joan Matabosch, también ha destacado la ópera Jo, Dalí, de Xavier Berenguel; y las óperas breves Una tragedia florentina y El nan, de Alexander Zemlinsky, que se representarán juntas bajo la dirección musical de Marc Albrecht.

Otro acontecimiento será el estreno de Pelléas et Mélisande, una ópera de Debussy que hacía 49 años que no se veía en el Liceu y que llegará con la dirección escénica de Robert Wilson. Para hacer frente a la situación económica, el Liceu dividirá sus óperas en función de su "comercialidad" y habrá tres categorías de precios: incrementos del 1%, 5% y 10% . Así, la producción del Teatro Real de La Bohème, de Giacomo Puccini, que en Barcelona tendrá a intérpretes como Fiorenza Cedolins, Ainhoa Arteta y Ramón Vargas.

50 años del debut de Caballé

También se verá la reposición de la versión que Els Comediants hicieron de La flauta mágica de Mozart; Le nozze di Figaro con dirección escénica de Lluís Pasqual y la Aida de Verdi, que tendrá como aliciente la batuta de Renato Palumbo y la voz de Sondra Radvanosky.

La programación de danza, la única que no subirá precios, incluye al ballet del Teatro Mariinski, el Corella Ballet de Castilla y León, el Grupo Corpo, los ballets de Montecarlo e IT Dansa. El principal concierto tendrá lugar el 3 de enero, con el 50 aniversario del debut de Montserrat Caballé en el Liceu, y entre los recitales destaca el del tenor Juan Diego Flórez.