La primera consecuencia no es otra que la revalorización de la zona. Según el Colegio Oficial de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria, si en estos momentos desapareciera la autovía, el valor de la vivienda se incrementaría «a partir del 20%». Ahora, la vivienda  en este barrio tiene un precio medio.

Como el centro

El metro cuadrado en la zona, en estos momentos, viene a costar alrededor de 3.750 euros. Con la obra, pasaría a costar más de 4.400 euros, lo que viene a salir ahora en otras zonas más céntricas como Alameda de Urkijo o Licenciado Pozas.

La anchura de la calle dará lugar a una avenida de lujo en la que tendrán cabida vehículos,  peatones y zonas verdes. «Puede ser una de las calles más bonitas de Bilbao», admiten los vecinos.

En Rekalde, donde la autovía que cruza el barrio también se suprimirá, la revalorización será similar, aunque la transformación del barrio no será tan acusada como en Sabino Arana.

Además de eliminar la contaminación acústica y visual, los vecinos ganarán, sobre todo, en seguridad, dado el peligro que supone.

Movilizaciones en el barrio

Los vecinos no las tienen todas consigo. A pesar de que el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, y el diputado general, José Luis Bilbao, anunciaron esta transformación como parte fundamental para llevar a cabo los accesos del nuevo Bilbao, los vecinos de Basurto saldrán a la calle. Otras promesas anteriores tampoco se cumplieron y, por eso, se movilizarán. Llevarán a cabo manifestaciones y recogidas de firmas.