Los aeropuertos de Baleares han destruido desde finales de 2008 y finales de 2010 un total de 2.315 puestos de trabajo por el cierre de empresas, como LTE y Futura (1.315 empleos) y el traslado de otras compañías a Barcelona, como Spanair y el Hangar de Iberia, según ha criticado el sindicato UGT, que ha advertido de que se podrían perder otros 120 empleos, después de que el próximo 1 de abril acabe el contrato vigente de AGA (compañía dedicada a dar servicios a aerolíneas) con Air Berlin.

En un comunicado, los responsables del sector aéreo de UGT han señalado que ante esta situación, lo "más indignante" es que el Govern está de "manos cruzadas mientras que Son Sant Joan pierde trabajadores y actividad en beneficio del Prat de Barcelona". Por ello, ha avisado de que, "o el Ejecutivo de Antich nos da muestras de hacer algo por los trabajadores del sector aéreo balear o nos veremos obligados a convocar paros y movilizaciones en breve".

En este sentido, han considerado "necesario" que el Govern "potencie el sector aéreo de Baleares", ya que, a su juicio, "no puede tolerar que los hangares se vayan a otra parte". Al mismo tiempo, ha estimado "necesario que seduzcan a empresas que inviertan en el aeropuerto y establezcan buenas condiciones laborales".

Por otro lado, UGT ha denunciado el "abandono total" de Iberia del negocio comercial y de mantenimiento en Son Sant Joan, ya que, según ha anunciado, a partir de abril, esta compañía "no realizará ningún vuelo con destino u origen en Palma, sino que los subcontratará a otras compañías como Vueling y Air Nostrum".

El sindicato ha recordado que, a finales de 2010, Iberia se comprometió a mejorar su productividad en Baleares mediante la recuperación de servicios externalizados a otras empresas, si bien " esa promesa sigue sin cumplirse, ya que el pasado 10 de febrero el delegado de Iberia en el archipiélago, Pedro Díaz, confirmó que no existía ningún avance para que algunos servicios externalizados los asumiera la propia Iberia".

Por otra parte, UGT ha advertido de que no aceptará que las condiciones del nuevo Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en la actividad de rampa que ha llevado a cabo Spanair en Málaga, Tenerife Norte, las Palmas y que se está negociando en Madrid se apliquen directamente a los empleados del aérea en Palma.

Así, ha detallado que se estima que este nuevo ERE de Spanair podría afectar a entre 5 y 10 trabajadores de rampa de Son Sant Joan. De esta manera, ha avanzado que UGT no se adherirá a un ERE de extinción de contratos negociado y firmado por otros, por lo que Spanair "tendrá que negociar este nueve ERE en Palma".

Asimismo, el sindicato ha dicho que no acepta la propuesta de Newco de que Palma se adhiera al ERE de extinción de contratos que ha realizado en Madrid, Málaga, Tenerife Norte y las Palmas, por lo que ha exigido que se negocie a nivel local un ERE que "no contemple la extinción de contratos, sino su suspensión temporal durante un año, ya que está en juego el empleo de, al menos, 10 trabajadores".

Además de los 1.315 puestos de trabajo que se perdieron en Baleares, con el cierre de LTE y Futura, UGT ha recordado que, mediante el ERE en Spanair, se trasladó a Barcelona a 926 personas, de las 507 pertenecían a servicios generales, de las cuales "la mayoría están en paro, ya que tenían cuatro meses de prueba en la Ciudad Condal y no les convencieron las nuevas condiciones".

Por otra parte, ha apuntado que, de servicios generales, sólo se ha quedado en Barcelona un 6 por ciento de los empleados, de modo que continúan 110 pilotos y 280 TCP (azafatas/os).

"Ahora, la aerolínea pretende que se vayan a Barcelona otros 97 empleados, por lo que sólo quedaría en Palma la rama de handling (con 72 trabajadores). A estos empleados ya se les está amenazando con un nuevo ERE, ya que la empresa asegura que sobra un 15 por ciento", ha explicado, al tiempo que ha advertido de que si se produjera un ERE en el handling de Spanair, peligrarían también 115 puestos de trabajo de la empresa Newco".