Jordi está sorprendido: su próxima visita al médico es de madrugada. Sufre una hernia discal, una dolencia muy molesta aunque no grave. Para decidir cómo tratársela, el traumatólogo le prescribió una resonancia magnética en Can Ruti (Badalona). Ya le han confirmado la visita: a las 4 de la mañana de un día de... julio.

"Las máquinas funcionan a pleno rendimiento las 24 horas del día de lunes a viernes; 12 horas los sábados y algún domingo", justifican a 20 minutos fuentes del hospital. Y añaden: "los especialistas revisan cada caso y priorizan en horario y en orden de atención". Por eso, según ellos, "hay pacientes a los que se les atiende inmediatamente; a otros, en días y en algunos casos, en meses".

Así, planifican pruebas a altas horas para hacer más visitas y recortar las listas de espera y rentabilizar los aparatos, que son muy caros y quedan desfasados en apenas unos años. El caso de Can Ruti no es único en Catalunya. Las máquinas de resonancias magnéticas funcionan todo el día en más centros. Entre ellos, según fuentes hospitalarias, el Duran i Reynals (Bellvitge), el Vall d’Hebron, Sant Joan de Déu y el Joan XXIII (Tarragona). Y en el Clínic, el Sant Pau y la Mútua de Terrassa están encendidas todo el día aunque de madrugada solo atienden a las urgencias.

"No es una medida cómoda, pero desde el punto de vista médico es buena: tienes antes el diagnóstico y se evitan listas de espera", asegura el secretario general de Metges de Catalunya, Antoni Gallego. Pero en el caso de Jordi, la visita es para julio, en cinco meses. "De no hacerlo así, igual le habría tocado a las dos de la tarde, pero en el mes de diciembre", explica Gallego.

Mayor efectividad

Además de acortar las listas de espera, con esta medida se "saca más partido a la máquina y se hacen más pruebas porque se aprovechan más horas", según fuentes del hospital Joan XXIII. En el Centre de Diagnòstic per la Imatge de la Vall d’Hebron, las máquinas de resonancia magnética operan las 24 horas. Placas y tacs solo se hacen de madrugada en casos de urgencia.

La Coordinadora d’Usuaris de la Sanitat Pública recordó que uno de los objetivos de esta medida es recortar las listas de espera, pero insistió en que los hospitales "no pueden obligar a los usuarios" a realizarse pruebas a según qué horas. "No todo el mundo puede ir de madrugada, porque no se puede desplazar, porque tiene personas a su cargo o porque no le va bien", explicó su portavoz, Carme Sabaté.