Cuando a Begoña Caparrós le dieron la noticia de que se cancelaban las oposiciones a maestro de carácter bianual previstas para 2011 esta directora de una academia privada de preparación de opositores de Madrid se encerró en una sala, se llevó las manos a la cabeza, y meditó la manera de dar tan mala noticia a sus 2.000 alumnos.

"¿Y ahora qué les digo? ¿Cómo se lo explico?", dice que pensaba en ese momento. Caparrós salió con paso firme, reunió a los estudiantes y les dio la noticia sin rodeos. Ante el visible enfado de su audiencia, les dijo que "debían pasar el duelo, aplazar los objetivos y seguir preparándose. La vida te pone pruebas y hay que saber sobreponerse". Pero ella misma reconoce que lleva "más de una semana sin dormir".

Caparrós y sus alumnos, tras varios días de desasosiego, ahora pueden respirar tranquilos, pues la comunidad madrileña ha rectificado y ha anunciado que finalmente convocará oposiciones para maestro este año. Sin embargo, en España aún hay miles de personas personas pendientes de que este viernes se publique la lista de las oposiciones que finalmente habrá en 2011. Miles cuyos proyectos vitales dependen de este examen.

El Ministerio de Educación impuso recortes a las Comunidades, que incluyen la reposición de un máximo del 30% de las jubilaciones de los maestros este año. Al menos cinco regiones (Murcia, Castilla-La Mancha, Canarias, Cantabria y Asturias) han decidido cancelar las pruebas selectivas que iban a convocar y cubrir las bajas con interinidades.

Murcia y Madrid fueron las primeras (aunque ésta última finalmente ha dado marcha atrás a ese recorte). Otras regiones limítrofes reaccionaron en cadena suspendiendo sus respectivas pruebas. Castilla-La Mancha, directamente, decía en su comunicado que suspendía las pruebas para proteger a sus interinos anticipando una avalancha de opositores.

Julián González, 28 años y profesor de Infantil en Guadalajara, estaba convencido de que éste era su año. "Iba a ser la cuarta vez que me presentaba y creía que tenía muchas posibilidades, por los puntos del concurso de méritos". González había empezado a estudiar, "varias horas a la semana", pero entiende que los que están más enfadados son "los que llevan desde septiembre pagando a sus preparadores en las academias". Tal es el caso de Alberto Melero, que a sus 25 años, era la segunda vez que se iba a presentar a una plaza de maestro de Educación Física.

"Llevo desde septiembre estudiando a tope. Estaba muy, muy motivado. Me había presentado en 2009 sin estudiar mucho y aprobé. Pensé que si realmente me lo tomaba en serio y pagaba a un preparador, podía sacar una plaza. Ahora van y las cancelan. Me lo he tomado muy mal. Es muy duro", dice indignado.

"Los opositores pagan una media de 100 ó 150 euros al mes por los cursos de preparación, más el material", explica Javier A., que además de director de un colegio público es preparador de oposiciones, "y este era, además, el último año con el temario actual. Estaba previsto que la próxima convocatoria, en 2013, fuera otro temario. Ahora no sabemos qué va a pasar".

Las Comunidades Autónomas con lengua propia sí tienen pensado convocar oposiciones este año. Allí no temen que haya una avalancha de opositores, por el filtro que supone la prueba del idioma. Pero Castilla y León, La Rioja y Extremadura aún están pensándolo, temiéndose una avalancha de comunidades que no ofertan plazas. Andalucía ya ha dicho que convocará al menos 3.000 plazas.

Alberto Melero está dispuesto a examinarse en Andalucía, o donde haya pruebas este año. "Y eso que dejo aquí a mi novia y a mis amigos y que no podría pedir un traslado hasta que pasen dos o cuatro años. Pero si no me presento ahora y luego congelan las plazas y no vuelve a haber otra oportunidad me voy a lamentar", explica.

Los sindicatos de enseñanza han pedido este jueves al Ministerio que obligue a las Comunidades Autónomas a convocar pruebas de acceso al Cuerpo de Maestros. El Ministerio de Educación reunirá mañana a los responsables de personal de todas las consejerías, pero su titular, Ángel Gabilondo, ya ha pedido respeto a la decisión de suprimir las pruebas atendiendo a las dificultades económicas.