El número de sospechas de enfermedad profesional detectadas por Osalan ha pasado de 288 casos en el año 2009 a 980 en 2010. "Un aumento importante", ha destacado la directora del instituto, Pilar Collantes.

Dicho incremento se ha anunciado en la presentación de la 'Estrategia vasca de Seguridad y Salud Laborales 2011-2014', acto en el que han participado la viceconsejera de Trabajo, Sonia Pérez, y representantes de sindicatos y patronal.

La estrategia, que sustituye al plan ideado durante el Ejecutivo anterior, tiene entre sus objetivos principales la integración de la historia médico-laboral en el historial clínico personal del ciudadano, para garantizarle la vigilancia de la salud postocupacional.

Además, el Gobierno pretende "detectar precozmente los factores de riesgo y deterioro que puedan afectar a la salud de los rebajadores", ya que las enfermedades profesionales suponen un gasto para el Ejecutivo.

A este respecto, Collantes ha anunciado que el Gobierno está realizando un estudio para evaluar el impacto económico de las enfermedades laborales, que en su mayoría de los casos "están pasando como enfermedad común", descargando las obligaciones de las mutuas laborales.

Entre la enfermedades más comunes se encuentran las relacionadas con problemas esqueletomusculares, que en su mayoría se provocan por la repetición de posturas.

Sin embargo, tanto la directora de Osalan, como el secretario de Seguridad Laboral de CC.OO en Euskadi, Jesús Uzkudun, han recordado que aún se detectan enfermedades pulmonares, relacionadas con el trabajo, como pueden ser la silicosis y el cáncer producido por amianto. ACCIDENTES

La estrategia, pactada en el seno de la Mesa de Diálogo Social, compuesta por el Gobierno vasco, Confebask, CC.OO y UGT, cuenta con otras líneas de actuación, dirigidas a fomentar una "cultural preventiva en la sociedad vasca", que van desde la formación a escolares a la inspección empresarial.

Para el responsable en relaciones laborales de Confebask, Jon Bilbao, que ha subrayado el "compromiso" de las empresas en la mejora de las condiciones laborales, el indicie de siniestralidad en Euskadi, 45 casos por cada mil, está ligado "al carácter mediterráneo", ya que a su parecer los ciudadanos de los países de sur de Europa son menos prudentes.

Por otro lado, la viceconsejera ha destacado el trabajo de la Mesa de Diálogo Social, y ha señalado que "la aportación de los agentes sociales es un elemento clave a la hora de dar respuestas".