La Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (Anpba) ha formalizado una denuncia administrativa ante la Junta de Andalucía por el lanzamiento de una pava viva desde el campanario de la parroquia Santa María de la Magdalena ocurrido el pasado día 3 en Cazalilla (Jaén) en el marco de la celebración de la festividad de San Blas.

Según ha informado este martes el colectivo, en su escrito al Gobierno andaluz ha invocado el principio de responsabilidad de la Ley 11/2003 de Protección Animal de Andalucía y el principio de proporcionalidad de la Ley 30/1992 de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas para solicitar las máximas sanciones.

En este sentido, la denuncia añade que es "fundamental que la cuantía de la multa sea la adecuada a fin de que no se vea devaluado el carácter disuasorio de las sanciones", especialmente cuando en el lanzamiento de la pava se dan tres agravantes: su trascendencia social, su presunta intencionalidad y la reiteración, año tras año, de dicho lanzamiento.

Para Anpba, el hecho de que las sucesivas multas de 2.001 euros anuales, incluso de 4.002 en 2008 y 2009, años en que se produjeron dos sanciones de 2.001 euros cada una en febrero y agosto, "es demostrativo de que la cuantía de las multas hasta ahora impuestas es exigua y ha de elevarse", por lo que ha solicitado que "dado que siete años (2004-2010) de sanciones de 2.001 euros no han producido el esperado efecto disuasorio, se impongan las máximas sanciones pecuniarias".

La asociación argumenta esta solicitud al entender que el lanzamiento de la pava vulnera la Ley 11/2003 de Protección Animal de Andalucía, cuyo artículo cuatro prohíbe emplear animales en fiestas populares y otras actividades si ello supone para el animal sufrimiento o es objeto de tratamientos antinaturales.

Igualmente, según ha precisado, ha aportado un informe elaborado por técnicos de la Administración competente en materia de bienestar animal que indica que "someter a una pava a un lanzamiento desde lo alto de una torre-campanario provoca a dicho animal sufrimientos y daños injustificados y antinaturales", lo cual está expresamente prohibido por la legislación vigente en Andalucía en materia de protección animal.

La denuncia interpuesta Anpba se une, de esta forma, a la que ya ha presentado por los mismos motivos la Asociación Andaluza para la Defensa de los Animales (Asanda) contra la persona que fue responsable directa de arrojar al animal y contra el Ayuntamiento de la localidad como responsable subsidiario, para los que también pide las sanciones más elevadas.