La Unión de Guardias Civiles (UGC), ha denunciado este martes el "afán recaudatorio" del Ministerio de Interior ante la puesta en marcha de un nuevo sistema de evaluación por puntos de los agentes, que premiará "al que más multas ponga".

Lo ha criticado el responsable estatal de la UGC, Manuel Mato, quien ha desvelado que los agentes tienen órdenes de "multar mucho" a los conductores, con lo que sus superiores cobrarían un complemento que, según sus cálculos, podría rondar los 6.000 euros anuales.

En cambio, si los agentes se niegan a acatar esa orden, tal y como ha indicado, se les recortan 200 euros de su salario. Esto ya ha ocurrido en Galicia a cuatro guardias civiles de Pontevedra, cinco de Lugo y tres de A Coruña; y Mato lo ha atribuido a la fijación especial de los mandos de esta comunidad por aumentar las multas.

"Se ha iniciado una campaña de caza al conductor, sin complejos, sin capucha y con total desvergüenza", ha censurado el responsable de UGC, quien ha lamentado lo "poco" que importa a los superiores la seguridad vial.

Prueba de ello, según ha señalado, es que hacer un boca a boca a un conductor con parada cardiorrespiratoria o excarcelar a un herido en un accidente supone "un punto" para el agente, mientras que las denuncias "valen muchos puntos".

"una vergüenza"

"Esto es una vergüenza", ha reprobado, para incidir en que los compañeros más veteranos no recuerdan una campaña como ésta para "sangrar" a los automovilistas "ni siquiera en los tiempos de Franco". "La caza de brujas sin media en la cabeza contra los conductores", ha apuntado Mato, comenzó a finales de 2010 y ahora ya hay órdenes de hacer lo mismo con los peatones.

"Los culpables son quienes dan instrucciones para que esto ocurra y, en la misma medida, los mandos provinciales y el responsable de la Guardia Civil de Galicia, porque para cobrar más no duda en dar órdenes para que se persiga a los ciudadanos", ha denunciado Mato, para recriminar que se haya convertido a los agentes en "simples recaudadores de impuestos".