El Ayuntamiento de Salt instalará 22 cámaras de seguridad en diferentes zonas del municipio, después que la Comisión de Videovigilancia de Catalunya lo haya autorizado, según ha explicado en rueda de prensa la alcaldesa, Iolanda Pineda.

En una primera fase se colocarán 16 en el sector centro, el barrio más conflictivo de la ciudad y dónde se produjeron los altercados del pasado mes de enero.

Esta primera fase consta de dos partes: en la primera se instalaran siete cámaras, repartidas entre la plaza del Ayuntamiento y las calles Àngel Guimerà y Francesc Macià, mientras que la segunda parte contempla la colocación de cámaras en la calle Torre i Bages.

Los primeros siete dispositivos entrarán en funcionamiento en dos o tres meses, y esta primera fase tiene un coste total de 102.000 euros —55.000 euros para las siete primeras y 47.000 euros para las nueve siguientes—.

Habrá dos cámaras en la plaza del ayuntamiento, una en la fachada del consistorio y otra desde Àngel Guimerà que enfocará la plaza; habrá dos más en un mismo punto de la calle Àngel Guimerà, una enfocará hacia la plaza de la Llibertat y la otra en dirección Francesc Macià.

Otra cámara se situará en el centro cultural las Bernardes y apuntará también hacia Francesc Macià; el sexto dispositivo se ubicará en la calle Doctor Ferran, a tocar del CRAE del municipio; mientras que la última se colocará en la esquina de Àngel Guimerà con la calle Pacheco.

El gerente de la empresa Localsec, Eduard Camós, ha explicado que las cámaras grabarán las 24 horas del día y que se instalará un control central en la sede de la Policía Municipal de Salt. Además, permiten identificar "nítidamente" a una persona situada a doce metros de distancia de la cámara, ha detallado.

Las seis cámaras restantes que quedan hasta llegar a las 22 autorizadas se situarán, posteriormente, en el parque de la Massana y en la plaza Catalunya. El proyecto global contempla la instalación de un total de 44 cámaras en toda la ciudad.

Actualmente en Salt hay nueve cámaras de seguridad de titularidad municipal: cuatro de ellas ubicadas en el aparcamiento del campo de futbol y cinco más en el parque Monar. Estos sistemas se integrarán después en el sistema genérico que controle las demás cámaras.

Seguridad ciudadana y efecto disuasorio

La alcaldesa se ha mostrado confiada de que estos dispositivos tengan un efecto disuasorio y ayuden a reducir los delitos y los actos incívicos en la ciudad. "Las cámaras tienen como objetivo la mejora de la seguridad ciudadana y su percepción", ha reconocido.

Además del efecto disuasorio que su presencia pueda tener, ya que se sabrá que hay cámaras colocadas y permitirán identificar a las personas que cometan delitos.

"También es un mensaje muy claro hacia los incívicos y las personas que provocan desórdenes públicos", ha matizado Pineda.

Los principales delitos que se registran en la zona centro —donde estarán ubicadas las cámaras— son delitos contra el patrimonio, contra las personas, faltas o infracciones graves de la ley de seguridad ciudadana, además de desórdenes públicos. "Con las cámaras ganaremos tranquilidad en las calles", ha reiterado la alcaldesa.