El coordinador del Plan 2014 en la Asociación para la Investigación de la Mejora del Cultivo de la Remolacha Azucarera (Aimcra), José Manuel Omaña, ha vinculado este martes el futuro de este cultivo a la modernización del regadío.

El futuro del sector está, por tanto, en las zonas en las que el regadío "se modernice" ya que, según Omaña, con el regadío modernizado "el coste energético puede reducirse a 200 euros por hectárea", mientras que en un riego de sondeo puede costar "entre 1.000 y 1.200 euros".

En el caso de uno superficial, en función del gasóleo y de la electricidad "puede rondar los 650 euros por hectárea".

Omaña ha participado este martes en una jornada organizada en Palencia por el Plan 2014 de la Junta de Castilla y León y Aimcra denominada 'Modernización del regadío y futuro de la remolacha en Castilla y León'.

"Quedarse fuera de la modernización es una disminución del patrimonio", ha explicado el coordinador antes de resaltar que, de cara al futuro, una parcela modernizada "es mucho más valiosa".

A todo esto añadió la posibilidad de dar al agricultor "una mayor calidad de vida y el hecho de que la modernización en automatismos y telegestión "facilitan que el riego no sea una carga".

El programa de la jornada cuenta con una serie de ponencias sobre las 'Necesidades de agua de la remolacha', la propia 'Modernización de los regadíos' y el 'Ahorro y coste de agua en los nuevos regadíos' y además ofrece una visión de los regantes de Ferduero, de la margen izquierda del Porma y del canal del Pisuerga.