El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano, ha explicado que solo una oficina de extranjería de la región ha pedido documentación diferente en la tramitación de expedientes de agrupamiento familiar y arraigo social al resto de estas oficinas, para evitar "fraudes" que se estaban produciendo en la documentación que aportaban los solicitantes.

De este modo se ha pronunciado el delegado del Gobierno regional, a preguntas de los medios, tras la denuncia realizada por el sindicato CCOO, que apuntaba que algunas oficinas de extranjería de la región reclamaban documentación diferente a los inmigrantes para formular dichos expedientes.

Díaz-Cano ha confirmado que sí se ha producido una solicitud diferente de documentación en una oficina de una provincia, en relación con las nóminas de uno de los demandantes de este proceso.

Y es que, según ha asegurado, se trata de una información que hay que verificar para asegurarse de que el solicitante tiene recursos suficientes para mantenerse asimismo y a su familia, y en este caso concreto "se estaban produciendo fraudes en las nóminas" presentadas.

Es por ello, ha precisado el delegado del Gobierno en la región, y para evitar dicho fraude, el personal de esta oficina de extranjería demandó las nóminas de todo un año, en lugar de las tres nóminas que se pide a todos los solicitantes.

Dicho esto, el delegado ha apuntado que el pasado viernes mantuvo una reunión con todos los responsables de las oficinas de extranjería de la región y con los secretarios de las cinco subdelegaciones para adoptar un criterio homogéneo para evitar que "no se pida documentación distinta a los ciudadanos extranjeros que solicitan su normalización a través del arraigo social o agrupamiento familiar".

Por último, el delegado del Gobierno en la región ha precisado que hasta la fecha CCOO no le ha demandando ninguna reunión sobre este asunto concreto, como anunció el sindicato, aunque ha mostrado su disposición a mantenerla para dar las explicaciones oportunas.