La Sección Primera de la Audiencia Provincial juzgará los próximos martes y miércoles, 15 y 16 de febrero, a cuatro personas acusadas de delitos de detención ilegal, extorsión y lesiones.

Los acusados, el dueño de un restaurante en Brazatortas y tres personas a las que contrató, se enfrentan a cuatro años de cárcel, el primero, y a nueve años y medio de prisión cada uno de los otros tres hombres.

Según el escrito de acusaciones, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos se remontan a enero de 2008, cuando el dueño del restaurante, A.O.R., recurrió a los otros tres procesados para cobrar los alquileres atrasados del local, que tenía arrendado a J.C.R., fallecido durante la instrucción del sumario, y su mujer, A.G.C..

El propietario del restaurante, por otro lado, había presentado una demanda de desahucio y reclamaba unos 31.000 euros. Los tres hombres contratados para obligar a pagar la adeuda son F.J.S.F., C.R.C. y M.M.M, a los que, supuestamente, se les ofreció 6.000 euros por hacer el trabajo.

El día 3 de enero de 2008, F.J.S.F. y C.R.C, sobre las 7.00 horas, abordaron J.G.R., cuando iba a subir a su coche en Puertollano, y le obligaron a conducir hasta la piscina municipal.

Una vez allí, le exigieron que pagará los 31.000 euros o que reconociera en un documento la deuda y, como no tenía dinero, le obligaron a conducir hasta el restaurante en Brazatortas

Allí llamaron a su esposa, para que fuera ella la que firmara un papel reconociendo la deuda, cosa que hizo al ver a su marido que había sido agredido y tras oía las amenazas de muerte sobre su marido y su hijo de ocho años.

Días después, el hombre rescindió el contrato de arrendamiento del restaurante y quitó la denuncia que había presentado, aunque la investigación siguió adelante hasta la detención de los cuatro procesados.